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Sacan la "lápida" del obispo Cox de la catedral de La Serena: fue acusado de delitos sexuales y sacado del país

Desde este domingo, el nombre del obispo Francisco José Cox ya no figura en la Catedral de La Serena. De acuerdo a un comunicado emitido por el arzobispado de dicha ciudad, la placa de mármol que incluía el nombre de Cox y otros arzobispos fue retirada con “asentimiento” de René Rebolledo, jefe de la diócesis serenense.

"El haber retirado la placa es un gesto de justicia y reconocimiento por los abusos cometidos por Cox. Es el fin de una época oscura", estima Juan Rojas, vocero de la agrupación de laicos Juan XXIII.

El año 2002, Francisco José Cox dejó Chile luego de ser denunciado públicamente como autor de abusos sexuales. Su nombre en La Serena aún es foco de conflictos, particularmente entre los laicos y el arzobispado de dicha ciudad.

Actualmente, existen dos denuncias ante instancias penales y eclesiásticas en contra de Cox. Ambas historias fueron contadas en The Clinic este año, y una de ellas fue llevada hasta el Vaticano por Jordi Bertomeu y Charles Scicluna. 

De hecho, el retiro del nombre de Cox se produce a un día que Hernán Godoy, uno de sus denunciantes, declare a los tribunales en lo que será el inicio del proceso civil en contra del arzobispo emérito.

La presencia de la placa en la Catedral provocó un conflicto entre la comunidad laica y el arzobispo de La Serena, René Rebolledo. En marzo de este año, Rebolledo expresó su rechazo al retiro de la placa, argumentando que “existiendo denuncias o no, el nombre de Cox forma parte de a historia”.

En junio, la agrupación Juan XXIII envió una carta al Vaticano solicitando la remoción de la placa. La misiva fue firmada por 100 personas, entre ellas el alcalde de La Serena, Roberto Jacob (PRSD); el alcalde de Coquimbo, Marcelo Pereira (DC), y los diputados Sergio Gahona (UDI) y Matías Walker (DC).

Según explicó a The Clinic el diputado Walker en esa fecha, “el caso de Cox refleja la poca sensibilidad que mostró la Iglesia frente a casos de abuso sexual. (…) Como católico, siento vergüenza de la sanción eclesiástica que recibió, porque básicamente se decidió situarlo en Europa para mantenerlo alejado de la polémica”.

Fotografía: archivo genealogiachilenaenred.cl