Durante semanas, el arzobispo de Malta, Charles Scicluna y el sacerdote español y notario eclesiástico, Jordi Bertomeu, estuvieron escuchando los testimonios en contra del obispo Juan Barros, sindicado como encubridor de Fernando Karadima.

 

Con todo el material recopilado, el pasado 20 de marzo le entregó a Papa Francisco un informe con los resultados de la investigación que hizo en nuestro país, donde una de las recomendaciones que le hizo fue que aceptara la renuncia de Barros luego de que presentara por tercera vez la solicitud, consignó La Tercera.

 

Para el vocero de los laicos de Osorno, Juan Carlos Claret, esta sugerencia vuelve a dejar la decisión en manos del Papa Francisco.

 

“Para nosotros vuelve a poner el centro de la responsabilidad en el Papa Francisco quien ahora más que nunca tendría por tanto un deber de responder y mirar a los ojos si va a aceptar esa renuncia o no, recordemos que el mismo Papa reconoció públicamente que Juan Barros le había presentado la renuncia en dos ocasiones, pero que él las descartó”, señaló.

 

Ante este escenario, Claret espera que “el arzobispo Scicluna no sea un nuevo mártir de Francisco, esperemos que Francisco pueda tomar la decisión más sensata”.