El falso archivo con imágenes enviadas por correo electrónico es en realidad un virus a través del cual delincuentes pueden obtener acceso a cuentas bancarias y antecedentes del “gordo” al cual le pese la conciencia y las abra.

 “Hola, aquí están las fotos que me pediste”. Así comienza el correo electrónico que ha llegado a diversas personas en las últimas semanas y que hoy es objeto de investigación por parte de la Brigada del Cibercrimen de la PDI.

“María Jesús”, es la supuesta amante que se comunica con el “patas negras” diciéndole “Hola Gordo, no sé porque me pediste que te envíe las fotos del día del motel a este correo”. Luego, añade “Muchos besos! Amor, no olvides borrarlas después de verlas ok? Si no te mato!”. Adjunto al mensaje, en que aparece un archivo que supuestamente contiene las imágenes.

En realidad, se trata de un tipo de estafa cibernética conocida como “phishing”, en que delincuentes infectan el computador de las víctimas con un virus, a través del cual pueden tener acceso a las claves secretas de los usuarios.

Uno de los usos más comunes que los delincuentes dan al “phishing” es para obtener las claves de acceso a las cuentas bancarias.

Según indicó el comisario Danic Maldonado, de la Brigada del Cibercrimen de la PDI, este mensaje conocido como “fotos del motel” ya está siendo investigado por la policía civil, luego de que la semana pasada recibieran la primera denuncia formal.

El virus se encuentra alojado en el servidor de la Universidad Técnica de Argentina. “Lo más probable es que esta institución haya sido víctima de un hackeo y los delincuentes escondieron ahí el programa”, indicó el comisario.

Los detectives, además, están realizando el rastreo para determinar desde qué lugar del mundo se está enviando esta comunicación a los usuarios chilenos. Las pistas llegan a Turquía, ya que ahí está alojado el servidor de la cuenta del estafador.

No son los únicos, pues los delincuentes cibernéticos han hecho circular correos electrónicos supuestamente atribuidos al Poder Judicial o a las policías, que dan cuenta de citaciones, multas y otras resoluciones judiciales o juicios que “afectan” al usuario.