El denunciante de haber sido víctima de una violación en la Catedral de Santiago habló por primera vez de los hechos y aseguró que lo único que busca es "verdad y justicia".
Daniel Rojas Álvarez, de 43 años, actualmente vive en las calles de Santiago y no tiene antecedentes penales. Está divorciado y tiene tres hijos.
En un reportaje de canal 24 Horas detalló los hechos que vivió en 2015, cuando fue "violado en la Catedral de Santiago con cuarenta y tantos años. Yo iba a buscar un remedio para mi hija, a esta edad cuesta creer que me pasó esto".
"Saco fuerzas de flaqueza para hablar con usted, pero lo estoy haciendo porque quiero verdad y justicia. Nada más. Y que vengan los golpes, que venga el prejuicio porque el prejuicio ya lo tengo. El prejuicio de estar en la calle, de mucha gente que prefiere seguir haciendo leña del árbol caído. El prejuicio de vivir invierno en esa banca", partió contando.
"Yo no necesito que me paguen un pasaje para ir a conocer al Papa, ni estar en el mejor hotel en Roma, yo no busco aquí millones, yo lo único que busco es verdad y justicia", manifestó acongojado.