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YoTambien y las campañas en redes sociales: ¿Sirven al cambio cultural?

Las denuncias que derrumbaron a un famoso productor hollywoodense iniciaron una campaña en redes sociales que busca visibilizar a las personas que han sido víctimas de acoso: #MeToo.

“Si todas las mujeres que han sido hostigadas o acosadas sexualmente escribieran “Yo también” en un estado, podríamos darles a las personas una idea de la magnitud del problema”, escribió a través de su cuenta de Twitter la actriz estadounidense Alyssa Milano.
 
Aquel mensaje desencadenó una campaña viral, bajo la etiqueta “#MeToo”, que cientos de mujeres alrededor de todo el mundo comenzaron a utilizar.
 
La campaña se lanza en el contexto del escándalo de Harvey Weinstein, productor de Hollywood que fue acusado por más de 30 mujeres que dicen haber sido abusadas sexualmente por él. La situación dejó en evidencia lo común que son estas prácticas en el mundo de la industria cinematográfica.
 
Rostros
 
Lady Gaga, Lea Thompson, Suki Waterhouse y Debra Messing fueron algunas de las celebridades que se sumaron a la campaña, de la que incluso algunos hombres se han hecho parte; el diseñador Sam Donovan y el comediante Nick Jack Pappas, son algunos de ellos.
 
Actualmente la campaña a trascendido continentes y los idiomas: #YoTambien, #AMiTambien, #MeToo, #MoiAussi, #EuTambem, son algunos de los ejemplos. Son muchos los lugares en el mundo donde la expresión se ha utilizado como etiquetas en Twitter, Facebook.
 
Otro objetivo de la campaña es comunicar la importancia de denunciar, de escuchar, educar a la población y apoyar a las víctimas para que, de a poco, el mundo pueda erradicar estas prácticas violentas tan comunes en la actualidad.
 
¿Sirven las campañas?
 
Habiendo una reflexión profunda en la sociedad sobre la violencia de género y sobre los cambios culturales que son necesarios reflexionar como país, vale la pena revisar la efectividad de las campañas que se realizan en redes sociales.
 
Consultamos a Claudia Dides, directora de la Organización Miles. Ella considera que “a pesar de ser #YoTambien una campaña originada en el extranjero, no sé si ha tenido influencia en el país, pero desde el momento que los medios comienzan a hacer eco de ella, claro que es algo positivo”, asegura.
 
“Si bien se trata de algo relacionado a un sector más farandulero, como es Hollywood, bien vale la reflexión sobre la violencia de género. Lo veo como un aporte por el solo hecho de haber visto que algunas personas en Chile hayan escrito es sus perfiles ya es algo positivo”, comenta Dides.
 
Al revisar las complejidades sobre los cambios culturales de nuestro país es tajante: “Se trata de cambios complejos y lentos, pero que en caso alguno son imposibles. Podemos ver cómo en los últimos 20 años hemos podido dar pasos para visibilizar la violencia de género, de cómo las mujeres han sido capaces de denunciar casos de violencia; pero, lo que resta por realizar, es eliminar la violencia de género. Hemos dado pasos pero faltan políticas públicas más drásticas para solidificar los cambios”, finaliza.
 
 
Marisa Soleto de la Fundación Mujeres explica que las campañas deben ir en dos direcciones para tener efecto: “Están las que buscan generar confianza a las víctimas, para que reciban el mensaje de que pueden recibir información, ayuda y soporte, y por otro lado están las que buscan afectar en el comportamiento”, explica.
 
“Todas se hacen con buena intención, pero en ocasiones se traslada un mensaje que es cierto pero con equívocos. Las mujeres que denuncian tienen ante sí un itinerario complicado, y estando solas siempre resulta insuficiente”, reflexiona.
 
“Me impactan y resultan positivas las campañas que tratan el problema como algo global, en el que si no nos damos cuenta todos somos cómplices. Y las que desmitifican el amor romántico, que es algo muy necesario. El machismo entre los adolescentes está en aumento, y es la población más vulnerable a este tipo de violencia”, finaliza.