El exfutbolista Iván Zamorano presentó en mayo de este año una querella por delito de estafa y apropiación indebida en contra de dos empresarios ligados a la Ciudad Deportiva que fundó el ídolo del balompié nacional.

 

Según indica La Tercera, Zamorano detalla en la denuncia que su “hombre de confianza”, Miguel Fernández Ainzua, gerente general de la concesionaria del recinto, y el propietario de la empresa RedSolución, José Miguel Guzmán Pérez, se habrían apropiado de 85 millones de pesos, que serían destinados a inversión en la Ciudad Deportiva.

 

Todo habría ocurrido después de los problemas económicos que enfrentó el proyecto. En ese momento la llegada de Fernández y Guzmán tendría como objetivo mejorar las cifras, sin embargo, una auditoría interna detectó posteriormente “movimientos de dinero sin respaldo, además de incumplimientos tributarios, falta de pago a proveedores”, y otras acciones calificadas como fraude.

 

La querella sostiene que Fernández -sin consultar a los socios- puso fin al contrato con la empresa Ernst & Young, responsable de las auditorías contables, encomendando esa función a RedSolución. “Esto, en la práctica, permitió y facilitó la actuación ilícita de los querellados, al eliminar todo control real sobre lo que ambos hacían”, sostiene el texto.

 

La Fiscalía ordenó a la PDI requerir registros contables de ambas empresas desde 2014 a la fecha y se espera que Zamorano declare en diciembre, en calidad de testigo, ante el jefe de la Unidad de Delitos Económicos de la Fiscalía Oriente, Roberto Contreras.