El ex ministro de Hacienda de Patricio Aylwin y canciller del primer mandato de Michelle Bachelet, Alejandro Foxley, valoró el proyecto que la bancada de la DC presentará hoy ante la Cámara de Diputados y en el que pide respaldar el llamado a los acuerdos realizado por el Presidente Sebastián Piñera.
Al respecto, el ex secretario de Estado sostuvo a La Tercera que con esta iniciativa "la DC puede recuperar su lugar en el sistema de partidos políticos si hace bien lo que hizo en el pasado, liderar sin complejos una convergencia de sectores distintos para pensar un país en el largo plazo que le ayude a la gente en sus problemas".
En esa línea, destacó que "quisiera expresar mi respaldo al proyecto que la bancada democratacristiana presentó en la Cámara de Diputados, porque lo que ahí se plantea es que en las actuales circunstancias del país, que son muy difíciles, hay que respaldar el llamado a acuerdo que hizo el Presidente Piñera".
A juicio del actual presidente de Cieplan, ello es necesario "porque la gente lo que quiere hoy es que el país recupere su capacidad de crecer, ya que de eso depende que se generen mayores empleos a futuro, y por lo tanto, también mejores oportunidades. También lo respaldo, porque la gente quiere de verdad una oposición constructiva".
"O sea, este país ha estado al borde de caer en lo que yo he llamado la trampa de los ingresos medios, y si caemos, ahí tomará décadas recuperarse. Por tanto, hay que buscar consensos", enfatizó.
Consultado sobre qué ganará la DC al seguir la senda planteada por Piñera, Foxley indicó que "mostrará liderazgo y, en definitiva, el camino que debe seguir el país más allá de un gobierno. Se trata de que se restablezca la confianza entre la política y los políticos".
Asimismo, el ex ministro subrayó la necesidad de reeditar la política de los acuerdos. "Absolutamente sí, no cabe duda. Para todos los que hoy se manifiestan muy críticos de ello, los invito a mirar los resultados: El país aumentó el ingreso por persona en más de tres veces, la pobreza cayó de 40% a 10% y aumentaron las tasas de inversión fuertemente".
"Cualquier indicador que se tome de esos años resulta extremadamente positivo, porque colocaron a Chile como el primero en América Latina. Entonces, por qué negar una muy buena experiencia", concluyó.