La militante de la Democracia Cristiana y candidata al Consejo Constitucional, Carmen Frei, criticó la gestión del Gobierno, precisando que “está pecando de soberbio y está al debe”.
En entrevista con el El Mercurio, Frei señaló que “en la segunda vuelta nosotros los apoyamos y, obviamente, no pedimos nada a cambió ni negociamos nada, pero a un año de la gestión, la evaluación es más bien negativa”.
“No se están cumpliendo las esperanzas de mucha gente y eso es muy frustrante. Un reflejo de eso es el rechazo de la reforma tributaria, porque creo que el Gobierno no ha sabido dialogar como corresponde. No se pueden imponer las cosas sin conversarlas antes”, sumó.
En ese sentido, se refirió al actuar de la oposición en el rechazo a la idea de legislar la propuesta, afirmando que “deberían haber aceptado. Creo que también en la derecha hay una necesidad de discrepar de todo, y eso es lo que lleva a que la gente rechace, porque creen que la política es pura confrontación, pura pelea, y yo creo que tanto el Gobierno como la derecha no han sabido ver bien que la gente no quiere eso para su país”.
En lo referido a la postura de generaciones más jóvenes sobre los denominados “30 años”, Carmen Frei acotó que “se equivocaron cuando creían que había que refundar todo, esa no es la historia de nuestro país. Al contrario, hay mucha experiencia acumulada”.
“Hay mucha historia dolorosa que a veces los jóvenes quieren que nos olvidemos de ella hoy día, por ejemplo, la tremenda deuda que tenemos aún con los derechos humanos, con tantas familias que todavía no saben dónde están sus seres queridos porque los botaron, los dinamitaron o los tiraron al mar”, expresó.
“Creo que pecamos en no saber enseñar y valorar lo que hicimos en 30 años (…) “Se hizo mucho. La gente joven no puede recordar, pero desde el año 90 hasta hoy los cambios han sido increíbles”, manifestó la militante DC.
Respecto a su candidatura al Consejo Constitucional por la región Metropolitana, la militante DC acotó que “no me podía restar de este desafío, más aún con el recuerdo de mi padre, que fue el que impulsó una nueva Constitución en los años 80, en plena dictadura”.
Consultada sobre qué tipo de Carta Magna buscará impulsar, precisó que apuntará a “una Constitución sobria”.
“Hay muchas materias que los chilenos y chilenas creen que tienen que quedar plasmadas en la Constitución, yo creo que eso es un error porque hay temas que son materias de ley. Pero debe ser un proyecto que realmente nos incluya a todos, sin distinciones”, reflexionó.