Solo quedan tres días para las elecciones, y sin duda los candidatos están tirando toda la carne a la parrilla, y mientras algunos están apostando a los dimes y diretes, otros se enfocan en aportar sus proyectos y sus visiones.

 

Aunque, una de las elecciones que también está en juego es la parlamentaria, en que más de mil candidatos (124 al Senado y 910 a la Cámara) apuestan por un cupo (155 diputados y 50 senadores).

 

Frente a la elección, Gabriel Silber (DC), lleva tres periodos como diputado, y ahora pelea por un cuarto por el distrito 8 (Maipú, Quilicura, Estación Central, Colina, Pudahuel), y responde a Cambio21 las inquietudes antes de la elección.

 

 

Estas elecciones son una gran primaria del mundo de la Nueva Mayoría, donde vamos a medir nuestra fuerza a nivel parlamentario, y a nivel presidencial. Pero la gran elección es el 17 de diciembre, y encuentro que queda mucho tiempo por delante, nadie puede actuar desde la soberbia o desde el nivel del triunfalismo, porque a partir del 20, se instala el segundo tiempo de la elección presidencial.

 

 

Hay que gobernar sin populismo, y sin consigna, y hay que pensar que cuando Piñera fue presidente creó muchos ministerios y reparticiones públicas y en consecuencia hay mucho populismo detrás de esas palabras. La gente pide seriedad, pero hablar de grasa cuando hablamos del servicio público me parece muy peyorativo a quienes cumplen esa responsabilidad.

 

 

Más que el copy-paste,  aquí el sustantivo es que del dicho hay hecho, hay mucho trecho. Piñera despidió a muchos funcionarios públicos de manera masiva y en consecuencia tiene una mirada del Estado casi como botín político y eso es una muy mala mirada a la administración pública, y creo que los funcionarios ya no confían en sus palabras o en esta carta.

 

 

Obviamente desde la Democracia Cristiana se fijó un estándar efectivamente estricto en esa materia, y llamamos a las otras candidaturas a seguir el ejemplo en esta materia.

 

 

Creo que nos quedamos corto en materia de educación superior, de llegar a 150 mil jóvenes cuando tenemos 900 mil que estudian en la universidad, implica seguir adelante en esta materia. Y segundo el tema de las pensiones, que pienso que es inabdicable para el próximo gobierno.

 

 

A mí me encanta la política, voy a seguir en esto, indistintamente cual sea la responsabilidad del lugar en que la gente me ubique, aun cuando siempre quienes somos candidatos tienen que representarse la posibilidad de ganar o perder, es parte de las reglas del juego.

 

 

Quien también va por un nuevo periodo, es el actual diputado Guillermo Ceroni (PPD), y quien plantea que la educación gratuita sin duda será su mayor preocupación, al igual que las pensiones de la tercera edad.

 

 

Está en juego fundamentalmente una visión progresista sobre el desarrollo económico-social del país frente a una posición conservadora. Cuando hablo de progresista me refiero a Alejandro Guillier, y lo que representan los otros sectores como Carolina Goic, Beatriz Sánchez y contra una posición conservadora total como es Sebastián Piñera.

 

Cuando digo progresista, me refiero a tomar temas como la reforma educacional con mayor intensidad, todo lo que significa más, al entendimiento, el manejo de los hospitales como corresponde y no a concesiones, y también al tema de la reforma tributaria, porque obviamente hay que manejar la salud y las pensiones.

 

 

Está totalmente equivocado, en el fondo eso significa disminuir el aparato estatal, porque evidentemente cuando tenemos funcionarios públicos es una forma de que el Estado a través de las políticas de cada gobierno llegue a la gente, y nosotros necesitamos funcionarios para que se vinculen más en terreno con la ciudadanía.

 

Ahora, otra cosa es echar gente que no esté técnicamente preparada, y que este solo para pagar favores políticos, ahí estoy de acuerdo.

 

 

Evidentemente a Sebastián Piñera no se le puede creer, en el sentido tal como uno sabe, porque  apenas asumió la administración dejó sin trabajo a una gran cantidad de personas solamente por un tema político. Ni siquiera los cambió del punto de vista de ineficiencia en su trabajo o en sus capacidades, sino que absolutamente por temas políticos. Es lo peor que puede suceder es cuando hay cambio de gobierno y eso debería de terminarse.

 

 

Me parece absolutamente inadecuado. Creo que justamente el desprestigio de la política que nos ha afectado a todos en forma injusta es precisamente por eso, porque creo que cuando uno ya tiene una investigación ocupa la justicia aunque no sea responsable, debe marginarse en campaña de ser candidato, hasta que no se esclarezca judicialmente lo que ocurre con esa persona, es falta de transparencia, y eso contribuye aún más a la mala reputación de la política.

 

 

Instransable va a ser el detener la gratuidad en la educación, eso no lo voy a transar.

 

 

Plan B, evidentemente será seguir en la actividad política desde otro ángulo, y obviamente seguir exigiendo lo que implica actuar en política. El no ser diputado no me impide seguir actuando en política.