En el marco de los sucesivos cambios de gabinete que pusieron en agenda la discusión de DD.HH. que tensionó a la derecha es que el presidente de Renovación Nacional y diputado Mario Desbordes profundizó sus diferencias con su partido aliado Evópoli.

Todo esto en el marco de una reunión citada para hoy a las 20:30, en la cual el Mandatario, Sebastián Piñera, se reunirá con los presidentes de los partidos de Chile Vamos para abordar las recientes polémicas.

 Respecto a la renuncia de Mauricio Rojas, el presidente de Renovación Nacional señaló a El Mercurio que "fue una polémica dura para el Gobierno. Nadie puede alegar que no se revisó el currículo y la historia de Mauricio Rojas, porque las conocíamos todos. Ahora, él jamás ha validado ni justificado las violaciones a los DD.HH.".

El episodio de Rojas generó controversias respecto a los Derechos Humanos en Evópoli, ante lo cual Desbordes indicó: "Cómo es posible hacer una declaración pública en medio de una tormenta de nuestro Gobierno, quitándole el piso al ministro. Ese tipo de cosas se hacen en privado. Le reprocho a Felipe Kast y a Hernán Larraín Matte que sea una constante intentar diferenciarse para hacerle creer a la gente que ellos son los buenos y nosotros los malos", sentenció Desbordes.

El diputado señala a Kast como uno de los culpables de esta constante diferenciación, según él para Kast, "nosotros somos los partidos que venimos de la dictadura y ellos son el partido moderno, bonito y simpático. Quizás esto tiene que ver con traumas en Evópoli. No debe ser sencillo para ellos cuando la mayoría de la dirigencia de Evópoli tiene a su progenitor o a algún familiar directo entre los principales gestores del gobierno militar".

Sobre una posible división de la coalición, para Desbordes estas pugnas podrían complicarlos, "uno siente que quien debe ser tu aliado te está pegando un puñete maletero. Estos son golpes bajos que dañan la confianza", finaliza.