Este martes se acaba el misterio en torno a la designación de los ministros para el inicio del segundo gobierno de Sebastián Piñera.

 

En tal sentido, llama la atención la posible confirmación de al menos cinco personeros que ya fueron secretarios de Estado en su primera administración, léase Andrés Chadwick (Interior), Cecilia Pérez (Vocería), Felipe Larraín (Hacienda), Alfredo Moreno (Relaciones Exteriores) y Loreto Seguel (Obras Públicas).

 

Si bien se trata de versiones de prensa y de listas que circulan en mensajes de WhatsApp entre dirigentes, parlamentarios y asesores, para un sector ligado a la derecha es claro que Piñera necesita a gente de su más estrecha confianza en las carteras más políticas, no así en las sectoriales y técnicas, donde llegarían parlamentarios y dirigentes con un sello mucho más ligado a los partidos de Chile Vamos.

 

 

Uno de los casos más especiales es el de Cecilia Pérez, quien fuera intendenta metropolitana y vocera de Palacio de Piñera, quien se asoma con un lugar de privilegio en la próxima conformación del gabinete.

 

Satirizada por Yerko Puchento, personaje que encarna el actor Daniel Alcaíno, al que denominó como “Monga”, en alusión al famoso juego de Fantasilandia, la militante de RN suena para volver a la Secretaría General de Gobierno, aunque para el analista Patricio Gajardo ese lugar sería más idóneo para alguien más joven.

 

“Se requiere darle un tiraje a la chimenea y entregar una imagen de renovación a alguien distinto, como por ejemplo Gonzalo Blumel, que recientemente se inscribió en Evópoli, y que encarna una derecha más liberal y que también proviene del círculo de confianza de Piñera”, comentó a Cambio21.

 

 

“Más que una revancha personal, ella tiene una posición consagrada en el sector. El tema es que si llega a la vocería estaríamos viendo la repetición del gobierno anterior. Y esa duda sobre ese duplicado será motivo de crítica. Ahora, ella es hábil políticamente y desde antes estaba en el primer plano. No es que vaya a salir de la nada… me la imagino en el Sernam”, agregó.

 

 

“Lo que dejó el gobierno de Michelle Bachelet es que las segundas experiencias nunca son buenas. Lo que dejaría Sebastián Piñera es que la segunda experiencia sería la misma que la primera. Y eso no sé si sea bueno”.

 

La reflexión es de Davor Mimica, analista y académico, quien sostuvo a este medio que “supuestamente estamos en una nueva etapa que requiere gente nueva. Sin embargo, es posible también que sean distractores de Piñera, a la usanza de Ricardo Lagos, que le gustaba dar señales en un lado para después hacer todo lo contrario”.

 

Respecto a Cecilia Pérez, el docente dijo que su elección como ministra “sería algo normal tomando en cuenta la lealtad de ella hacia Piñera. Si no es elegida en el gabinete, igual tendrá una ocupación estelar en su gobierno”.

 

“Lo preocupante es que Pérez, sumados a Chadwick, Felipe Larraín, Moreno y Seguel, equivalen a retomar en 2018 lo que quedó pendiente en 2014. No iniciar algo nuevo. Es decir, hacer lo mismo, cuando esa fórmula no fue muy sobresaliente que digamos”, sentenció Mimica.