Por María Cristina Prudant

Jorge Rodríguez Grossi es economista, académico, investigador y político. Fue ministro de Economía, Fomento y Turismo entre 2017 y 2018. En junio de 2001 designado por el presidente Ricardo Lagos como triministro de Economía, Energía y Minería; en esta última ejerció hasta 2002, cuando el Ministerio de Minería fue separado de las dos primeras. Fue presidente ejecutivo de Codelco.
En la actualidad es Decano de Economía y Negocios de la Universidad Alberto Hurtado.

El profesional analizó la reforma tributaria de Piñera y la marcha de la economía nacional  y del gobierno en forma exclusiva para Cambio21.

La Reforma Tributaria pendiente

El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, no quiere abordar ciertos temas en la discusión de la Reforma Tributaria como el aumento de los impuestos al sector más rico del país. ¿Qué opinión le merece esta postura?     

Para mí el impuesto a la ganancia de capital de las empresas debiera tratarse como un tema de competitividad país más que como un tema de redistribución de ingresos. Por la siguiente razón: ese tipo de impuestos no puede ser más alto que el de países con los cuales competimos porque, si es más alto, lo que estamos haciendo es generarle una ventaja a otros países para que reciban inversionistas que podrían haber venido a Chile.

Entonces, este tema del impuesto a las utilidades, a mi juicio, se debe tratar desde una perspectiva de competencia y no desde la distribución de ingresos. Los temas de distribución del ingreso deben  tratarse en el impuesto a la renta. O sea, si nosotros estamos haciendo un cambio en el impuesto de las utilidades, la razón de fondo debiera tener que ver con competitividad del país no con temas de distribución de ingreso. Y si lo que queremos es mejorar el impacto distributivo de los tributos deberíamos irnos entonces al impuesto a la renta y, eventualmente si es necesario aumentar los impuestos a la renta.

¿Usted ha visto el proyecto de ley sobre Reforma Tributaria que envió el gobierno cuando aún no entra definitivamente en régimen la reforma de Bachelet?

Hay unos aspectos de modernización del sistema tributario que creo que sí hay que hacerlos de todas maneras y que debieran tener apoyo. Y respecto de la Reforma Tributaria de principios del gobierno de la Presidenta Bachelet , creo que efectivamente la reforma no fue lo que se esperaba desde el punto de vista de su eficiencia y, aparentemente, sí  perdimos algún grado de competitividad respecto de otros países en términos de recepción de inversión.

Entonces, a mí me parece que corresponde, a pesar de que ha pasado tan poco tiempo, que revisemos eso porque si estamos cobrando, al final de cuentas, más de lo que debiéramos creo que vale la pena corregirlo. Y le repito que la corrección, en términos de distribución del ingreso, debiera ir por el lado del impuesto a la renta.

---¿Está considerado en la nueva Reforma Tributaria?

 Esto último no viene contemplado dentro del proyecto de ley y a lo mejor en el trámite parlamentario se incorpora.

---Usted está de acuerdo con quienes dicen que esta reforma es para favorecer a los más ricos?

No, no estoy de acuerdo por eso lo que decía al comienzo. La ley que graba las utilidades de las empresas  hay que mirarla no de la perspectiva de la distribución de ingreso. Esta debe ir por dos lados; por el lado del impuesto a la renta y en segundo lugar por el lado del impacto del gasto público, que en el caso del impuesto a las utilidades de las empresas, lo que nosotros tenemos que buscar es el mejor impuesto que nos deja competitivos frente a otros países que también están buscando inversionistas. Explico, si en países con los que nosotros estamos compitiendo se está cobrando tres puntos menos que lo que cobramos nosotros los inversionistas se van a ir a esos países y no a Chile.

Entonces, si queremos compatibilizar el crecimiento económico con equidad lo que tenemos que hacer es tener un impuesto a las utilidades que sea menor que el que tienen otros países con los que nosotros competimos y reequilibrar el tema distributivo a través del impuesto a la renta que habría que subirlo.

El problema del empleo 

El gobierno de Piñera lleva seis meses ¿cómo observa usted su desempeño?

A mí me parece que se han demorado un poco más, de lo que uno habría esperado en implementarse, porque no hay duda que cuando uno llega al gobierno tiene que aprender y acostumbrarse a los nuevos cargos , pero ya seis meses, de 4 años me parece un poquito excesivo. Entonces, creo que ya es hora que en el gobierno esté a caballo. Todavía hay una sensación de que muchas de las reformas importantes que se anunciaron no están todavía listas para ser discutidas por el Congreso, pero ojalá que lo logren hacer bien por el bien  de todos.

¿Usted cree que esa demora está influyendo en la baja de Piñera y el gobierno en las encuestas?

 Creo que hay muchos otros factores de tipo político. Creo que la adhesión a Piñera se acerca mucho a lo que fue la votación que tuvo en la primera vuelta, que es el voto firme que tiene.

De todas maneras ha bajado y ha aumentado la desaprobación al gobierno...

Eso le ha pasado a muchos Presidentes nuestros, es solamente realismo. Creo que el apoyo del Presidente Piñera, el firme, es el que sacó en la primera vuelta. El segundo es influido por otros factores porque la gente tuvo que elegir entre dos y no entre todos los candidatos que hubo.

¿Qué le parece que, nuevamente Piñera se ve involucrado en problemas con sus negocios? Ahora se trata de la compra de acciones LAN con información privilegiada...

Creo que por el bien del país nosotros tratemos de mirar al futuro y no estar cada momento tratando de desprestigiar a nuestros políticos sino vamos a terminar muy mal como país, de verdad. Ese es un tema que ya pasó, ya tuvo su proceso judicial y yo creo que hay que mirar más para adelante que para atrás ahora.

Respecto a las expectativas de la gente  de lo que sería el gobierno de Piñera. Por ejemplo, todos esperaban tener empleo, sin embargo ha aumentado el desempleo...

El empleo ha ido subiendo. Lo que ha ocurrido es que ha aumentado fuertemente la fuerza de trabajo por lo tanto, uno puede tener una situación que un mes puede ser una tasa de cesantía más alta que anteriormente y que no necesariamente refleje una peor situación. Porque si aumenta más la fuerza de trabajo eso es perfectamente compatible con una mejora económica.

Inversión no es instantánea

¿Qué diría del gobierno de Piñera, sobre su futuro?

Creo que hemos ido llegando a la situación de realismo, en términos de apoyo. Hoy día es evidente que el gobierno no tiene mayoría en el Congreso cosa que por alguna razón misteriosa parecía que no era la realidad al comienzo del gobierno y eso indica que va a tener que trabajar bastante tratando de lograr consensos para poder tratar de sacar sus proyectos adelante, pero no me parece nada raro lo que está pasando, es muy normal.

Había mucha expectativa con el gobierno de Piñera porque muchos creyeron que se instalaría y todo sería mejor...

La inversión siempre se rige por expectativas y por las condiciones reales que existen en una economía. Creo que en ese sentido el período transcurrido de seis meses es insuficiente para emitir algún juicio. Nadie debiera haber esperado que en abril los inversionistas aumentaran violentamente sus proyectos y por lo tanto, lo que está pasando es, a mi juicio, normal. Creo que hay un ambiente mejor que el que había antes de la elección, en términos de la inversión, pero no va a ocurrir nada extraordinario si no hay cambios importantes en materia de tributación y por otro lado si el panorama internacional no se consolida en forma optimista. Hoy tenemos el fenómeno de China con Estados Unidos que es una amenaza para todos y con un precio del cobre bastante malo para nosotros. Esas son condiciones objetivas que todos los inversionistas toman en cuenta , entonces más allá de que si a ellos les gusta o no Piñera están las condiciones objetivas que influyen en la rentabilidad de los proyectos.

Entonces usted considera normal que no se concreten aún las expectativas que tenía la gente que votó por Piñera...

Esas expectativas creo que eran completamente irreales , o sea, los inversionistas en su gran mayoría no invierten  porque les gusta o no el gobierno de turno sino que si los proyectos son buenos o son malos y lo que ha ocurrido en seis meses es que no ha cambiado radicalmente la situación .

De hecho al final del gobierno de la Presidenta Bachelet el cobre estaba mejorando su precio, pero ahora está más malo. Nadie esperaba eso y lo otro que tampoco nadie esperaba que la situación e China con Estados Unidos empeorara y resulta que ha empeorado. Frente a ese escenario los inversionistas son serios. Ellos no invierten porque les guste o no el gobierno sino que dependiendo de cómo son las perspectivas de rentabilidad en cada proyecto de inversión. Yo, por lo menos, no estoy extrañado, lo que sí me extraña es que haya gente que crea que los inversionistas invierten por razones políticas, invierten si el proyecto es bueno o no.

Lo que pasó es que la derecha creó expectativas durante la campaña para que votaran por Piñera...

Claro , eso no es realista.