Por María Kovacz

Pareciera que los parlamentarios no han aprendido nada estos últimos años. Esto, porque una vez más son el blanco de críticas por su actuar. La Cámara de Diputados acordó, por unanimidad, la propuesta de modificar el horario de funcionamiento de la Sala el martes 2 de enero, post celebraciones de Año Nuevo.

Así, la sesión no se realizará a las 10:30 horas como es habitual, sino que la acomodaron para funcionar a las 17:00 horas. Esto, según explicaron, es para dar las facilidades para que los parlamentarios de regiones puedan reservar los pasajes aéreos para llegar al Congreso y así "garantizar" el funcionamiento de la Sala.

La excusa

El diputado Felipe Ward (UDI) explicó la decisión, señalando que fue "una propuesta de la mesa que fue aceptada por los comités y que también ratificó la Sala", aunque señaló que "aún se puede perfeccionar el tema del horario".

Ward sostuvo que "entiendo la preocupación que esto genera, la molestia que puede generar desde el punto de vista de una decisión del Congreso, pero quien tiene que explicar esto es la mesa (...) es la que tiene que dar la explicación final".

"Lo que se persigue con esta medida de modificación de algunas horas de inicio de la sesión del 2 de enero es que los parlamentarios que provienen de regiones tengan más posibilidades de poder llegar. La sesión es la misma, el horario de funcionamiento es el que cambia", aseveró.

El parlamentario indicó que "no se modifica ni la sesión ni las comisiones que van a realizarse eventualmente el martes, miércoles y jueves de la primera semana de enero".

Por su parte, el presidente de la camara, Fidel Espinoza (PS) salió a defender la medida. "Yo creo que debemos preocuparnos de los temas país. Acá no hay ninguna suspensión de ninguna comisión y no hay suspensión de la sesión, esto solamente ha ocurrido por petición de algunos diputados que han señalado lo siguiente: después de largos años corresponde el regreso de la labor parlamentaria post Año Nuevo a un día legislativo propiamente tal. Por lo tanto hay problemas ya con los pasajes aéreos, hay complicaciones para poder llegar al Parlamento, a no ser que los parlamentarios se tengan que venir el primero (de enero), en la mayoría de los casos cuando tuvieran pasaje, los que ya no tienen pasajes, no tienen ninguna posibilidad", declaró.

Espinoza explicó que algunos diputados habían solicitado incluso la suspensión de la sesión para ese día o el traslado para el viernes, sin embargo, se optó por esta metodología que establece que la sesión comience a las 17:00 y termine a las 19:00 horas. Lo que indirectamente significa también una disminución de una hora y media en relación a la jornada habitual de los martes.

"Lo principal es que aquí no va a haber ninguna sesión suspendida, van a funcionar todas las comisiones y por lo tanto el Parlamento va a trabajar como corresponde. Nos critican por todo", recalcó el presidente de la Cámara.

La molestia ciudadana

Sin embargo, las excusas no han sido suficientes para que la ciudadanía reaccionara, y las redes sociales han sido el principal medio de desahogo social, en que la mayoría de los comentarios apuntan a la “falta de realidad” de los diputados, esto porque muchos trabajan el 2 de enero, debiendo cumplir el horario normal de su jornada, pese a estar lejos del lugar.

Frente al tema, el sociólogo de la Universidad Católica, Reinaldo Cifuentes en conversación con Cambio21, dijo que “sin duda la gente, sobre todo quienes deben trabajar ese día les provoca molestia, porque piensan que ellos son superiores, pese a que deben realizar un trabajo como todos los chilenos”.

“Además, el ser humano no olvida, y cada cosa que haga el parlamento se saca en cara todos los hechos anteriores, porque el sector público y sobre todo senadores y parlamentarios está muy mal evaluado”, puntualizó el experto.

Para finalizar, Cifuentes dijo que “lo que molesta sin duda, es que el parlamento hace cosas que molesta a la ciudadanía, partiendo porque se aumentan el sueldo, se dan días libres y ahora el horario, cosa que cualquier trabajador común y corriente no puede hacer, y entonces sientes que ellos viven en otra realidad y que se aprovechan de su poder”.