La actual concejala de Ñuñoa y hasta este lunes candidata del Partido Socialista (PS) a la alcaldía de esa comuna, Paula Mendoza, decidió deponer definitivamente su candidatura al sillón municipal, en lo que calificó como "un gesto concreto" en favor de la unidad de las fuerzas opositoras para recuperar una alcaldía que la centroizquierda no obtiene desde 1992.
La edil manifestó que resolvió dar este paso por "su responsabilidad con las vecinas y vecinos de Ñuñoa, para recuperar una gestión municipal participativa y transparente, progresista, innovadora y solidaria, comprometida con la historia y el patrimonio", con lo que realizó gestos hacia sus, hasta hoy, competidoras dentro de la oposición en la tarea de llegar a liderar el municipio, Emilia Ríos (RD) y Alejandra Placencia (PC), además de Juan Pablo Sáez (DC) y Rodrigo Maureira (UPA).
"La generosidad se debe expresar con gestos específicos, como el que estoy haciendo, y llamo a las demás candidatas y candidatos a seguir en esta senda de unidad. Continuaré trabajando por nuestra comuna y por todas y todos sus habitantes", aseguró Mendoza, agregando que "la política que esperan las y los chilenos se hace con gestos concretos más que con declaraciones. El país que queremos, como dijo nuestra candidata presidencial Paula Narváez, se hace dando el máximo esfuerzo por lo que necesitamos y no en la medida de lo posible".
En tanto, desde la testera socialista, su presidente Álvaro Elizalde, valoró la decisión de la concejala Mendoza, asegurando que "es una muestra de generosidad extrema".
"La decisión de Paula es un ejemplo a seguir, la voluntad de deponer una candidatura, pese al enorme apoyo que tiene en Ñuñoa, para contribuir de esa forma a que las fuerzas progresistas tengan menos postulantes en competencia y, por tanto, que estén en condiciones de derrotar a quienes se oponen a los cambios que Chile demanda", afirmó el senador.
Asimismo, el timonel del PS aseguró que "ante un cuadro de dispersión completa de la oposición, la división sólo contribuye a un triunfo de los sectores conservadores", y señaló que "lamentablemente, esta ha sido una constante en muchas comunas de Chile, donde ha primado el interés personal o de un determinado partido por sobre la necesidad de la unidad del conjunto de las fuerzas progresistas".