Esta semana Perú vivió días de convulsión. El indulto dado por el presidente Pedro Pablo Kuczynski al condenado expresidente Alberto Fujimori originó movilizaciones y protestas.
Pero no solo en el país vecino se abrió el debate, la instancia tuvo consecuencias en nuestro ambiente político, con Punta Peuco y sus condenados como eje.
Boric vs J. Kast
Todo comenzó este lunes cuando el diputado José Antonio Kast aseguró que el indulto al exmandatario, quien se encontraba condenado por crímenes de lesa humanidad, es "un ejemplo de avanzar en justicia y no venganza".
En esa línea, el exUDI hizo un paralelo con la situación de los violadores de derechos humanos que hoy se encuentran recluidos en Punta Peuco.
"En Chile tenemos ancianos presos, civiles y militares, que apenas pueden ponerse de pie y que requieren atención médica permanente. ¿Qué sentido tiene mantenerlos en la cárcel? Indulto, arresto domiciliario, vigilancia permanente. Todos tienen derechos humanos", sostuvo Kast.
Por su parte, Gabriel Boric, explicitó su férrea oposición a las "lógicas de impunidad" que traerían “parte de la derecha que llega a Chile”.
"¿Cuál es la lógica de impunidad detrás de la liberación de un anciano, enfermo e inhabilitado? Aplicar tratos inhumanos no es justicia, es venganza. En nombre de los derechos humanos no se pueden seguir violando derechos humanos", respondió Kast.
El diputado por Magallanes replicó que "exigir que se cumplan condenas por crímenes contra la humanidad no es venganza, sino justicia. Justicia no solo en nombre de las víctimas sino de la humanidad entera. Por eso este tipo de delitos son imprescriptibles e inamnistiables".
Qué sucede en Chile
La situación que se vive en Perú de forma innegable deja el tema sobre la mesa en cuanto a las solicitudes de indulto y beneficios carcelarios de parte de los condenados por delitos de lesa humanidad.
¿Qué sucederá con ellos en los meses que queda de Gobierno? ¿Cambiará algo con la llegada de Sebastián Piñera? Se podría considerar una liberación de condenados. La discusión toma fuerza y los grupos se preparan.
Nuevo Gobierno
Para el abogado Héctor Salazar la problemática del indulto no tendría que ser un tema en sí mismo, “salvo que no se lo mire como algo general” y se busque indultar “a un solo tipo de condenados”, explica.
“Si se buscara adoptar medidas de morigerar condenas o de aplicar beneficios carcelarios para personas con enfermedad terminal, tiene que ser algo amplio para todos. Esto porque podría llegarse a establecer una discriminación arbitraria entre condenados”, indica Salazar.
Sobre la llegada de un nuevo Gobierno y su cercanía con una mirada ideológica, el abogado es cauto. “No lo veo muy probable y tampoco me gusta especular, me gusta estar fundado en los hechos, a pesar de ser evidente que un sector de la derecha presionará a Sebastián Piñera en este tipo de materias, pero no manejo antecedentes que permitan suponer que esto pudiera llegar a concretarse”, aseguró el abogado.
Para la dirigenta Lorena Pizarro, lo sucedido en Perú marca un precedente y deja en claro “la corrupción del Gobierno de PPK y de la ayuda política que recibió de parte del fujimorismo. El indulto es una consecuencia de este apoyo”.
Frente a lo que podría llegar a suceder en Chile con la llegada de la administración de Sebastián Piñera y la posibilidad de indultos, la dirigenta dice estar preocupada porque “no le cabe la menor duda de las presiones que se sentirán, siendo José Kast el principal vocero de los condenados por delitos de lesa humanidad”, indica.
“No estamos hablando de indultos porque sí, o fundados en razonamientos absurdos o ridículos, debemos tener claro que hablamos de condenas de genocidas, quienes nunca han mostrado arrepentimiento ni colaboración alguna. Ellos representan 17 años de horror y tortura, lo demás es mentira”, concluyó la presidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos.
