El 17° Juzgado Civil de Santiago ha dictado la disolución de la fundación Democracia Viva, tras una demanda presentada por el Consejo de Defensa del Estado (CDE) debido a numerosas irregularidades. Según la resolución de la jueza María Isabel Reyes, la fundación infringió gravemente sus estatutos y no cumplió con los requisitos legales para mantener su personalidad jurídica.
El proceso reveló que Democracia Viva, liderada anteriormente por militantes de Revolución Demócrativa y quién la presidía era el ex líder RD Daniel Andrade, no gestionó adecuadamente el reemplazo de miembros del directorio, careció de las firmas necesarias en las actas y, en algunos casos, no realizó las sesiones requeridas. Además, se identificó un mal uso de los fondos, gastando casi la totalidad del aporte social en gastos constitutivos en lugar de su objetivo social.
El ministerio de Justicia, encargado de fiscalizar las asociaciones y fundaciones, también destacó que los convenios celebrados por la fundación con la Seremi de Vivienda de Antofagasta no correspondían a su objeto social, lo cual desvió una suma considerable de recursos.
El fallo también señaló que el objeto social de la fundación era ambiguo y su definición carecía de concreción, lo cual dificulta la transparencia de sus operaciones. Además, el patrimonio no fue adecuadamente acreditado y no se especificaron claramente los beneficiarios, siendo el aporte social considerado insuficiente para las amplitudes de sus metas.
Como resultado de estas infracciones, el juzgado ha ordenado la disolución de Democracia Viva y la fundación deberá cubrir los costos legales del proceso. Este caso subraya la importancia de la transparencia y el cumplimiento estatutario en las organizaciones no gubernamentales.