Era una apuesta y resultó con creces, la colombiana Alejandra Azcárate logró realizar una rutina muy aplaudida por la Quinta Vergara, quien la premió con dos gaviotas.
Pero a pesar del triunfo, la humorista confesó que fueron meses terribles para ella. "Venía preparada para lo peor, en ningún momento me confié, tenía mucho miedo. Es muy difícil enfrentarse a lo desconocido hasta que el milagro pasa", dijo respecto al monstruo y su posterior aprobación.
En ese sentido, contó que dos minutos antes de presentarse vivió momentos de mucha angustia. "Era tanta la ansiedad que recuerdo que el cierre de mi vestido empezó a fallar, llegó una chica de vestuario, agarró un hilo, faltaban dos minutos y estaba muy angustiada y más encima mal de la garganta. Llegó Rafael Araneda, me dio agua con jengibre y cuando salí quedé tan nublada que estaba poseída por el pánico", lanzó.
Tras esos terribles momentos iniciales, se relajó y logró involucrar a la gente en su rutina. "Lo que más feliz me hace fue conectar con el público chileno, no necesité apelar a muchas herramientas propias chilenas y de todas forma se generó una buena magia".
Uno de los grandes momentos de su presentación fue el chiste que lanzó contra Julio César Rodríguez. "En ese chiste yo siempre nombro a Miguel Jaramillo, mi esposo, pero si lo decía nadie iba entenderlo. Por eso busqué el nombre de un galán chileno y me dijeron el suyo. No fue algo personal, fue un recurso gracioso con respeto que espero lo haya recibido con la misma gracia", apuntó.
Finalmente tuvo palabras para su estilo, uno donde apela a un lenguaje alejado de las groserías, a diferencias de otras colegas. "No puedo hablar del trabajo de las demás porque me parece es entrar en una zona de irrespeto. Mi trabajo siempre se ha caracterizado por no utilizar ese recurso ya que me parece una herramienta muy básica. No considero que sea necesario el uso del mal lenguaje. Es parte de mi sello, de mi estructura, se demostró que con un trabajo bien escrito y puesta sencilla y contundente de corazón se lograron dos gaviotas que me parecieron milagrosas", cerró.