En su segunda sesión de debate en particular, y tal como habían acordado sus integrantes la semana pasada, la Comisión de Constitución aprobó el proyecto que busca rebajar la dieta parlamentaria y los sueldos de altos cargos estatales, pero sin la reducción transitoria del 50 por ciento.
La iniciativa, que actualmente consta de varias iniciativas relativas al mismo asunto que fueron refundidas en una sola (boletín 9304-07), fue visada por unanimidad en la instancia y despachada para ser votada en Sala, aún en su segundo trámite constitucional.
La modificación más significativa fue una indicación de los senadores opositores José Miguel Insulza y Alfonso de Urresti, del PS, y el PPD Felipe Harboe -los dos últimos integrantes de la Comisión-, con beneplácito del oficialismo. Ésta sepulta la propuesta que había salido de la Cámara Baja que fijaba una reducción transitoria del 50 por ciento hasta que un organismo distinto, como el Banco Central, lo defina.
De esta forma, en el texto despachado por la instancia quedó establecido que 30 días después de promulgada la reforma constitucional, el Consejo de Alta Dirección Pública definirá la rebaja transitoria, que deberá ser equivalente entre parlamentarios y ministros, en una proporción según un estudio del organismo.
Este cambio fue considerado la semana pasada, cuando se conoció el acuerdo de la comisión, "inexplicable y escandaloso" por los diputados Gabriel Boric y Giorgio Jackson, los principales impulsores de rebajar las dietas.
Los senadores de la comisión aprobaron también que una comisión de "alto nivel" estudie el sueldo que deban percibir los cargos más saltos del aparato público, sean autoridades de Gobierno, ministros, personal de confianza, y la dieta parlamentaria, a más tardar 18 meses antes del inicio próximo período legislativo y presidencial, cuando pretenden que comience a regir la rebaja definitiva.