La transparencia de las reuniones de varios ministros con empresarios en el departamento del lobista UDI Pablo Zalaquett trajo nuevas sorpresas esta semana que han vuelto a poner en el tapete el mal manejo del gobierno en este episodio.

Los ministros Nicolás Grau, Maisa Rojas y Esteban Valenzuela no tuvieron una reunión, sino varias con diversos sectores empresariales y solo se registraron en la plataforma que informa de las reuniones de lobby, lo que ha generado serias críticas por ejemplo de la Comisión de Medio Ambiente de la Cámara y en el caso de Ministra del Trabajo hubo un trascendido desde el PC que esas reuniones habían sido autorizadas previamente por Presidente de la República.

¿Por qué tanta crítica política a una relación que es propia de los ministros y ministras como es relacionarse con los diversos actores de su ecosistema?

La primera razón es porque claramente se estaba incumpliendo la ley ya que está obliga a registrar las conversaciones con actores que plantean sus visiones e inquietudes sobre proyectos de ley o las políticas sectoriales. Ciertamente lo obvio sería que estas conversaciones se realizarán en los ministerios, pero si se decide realizarla en otro lugar, con más razón debe quedar ese registro. Recién esta semana los ministros registraron las reuniones con empresarios -conocidas a fines de diciembre-después de una instrucción presidencial.

También hay molestia porque la coalición gobernante prometió transparencia en la relación con el mundo empresarial, hace años cuestionó “la cocina” en la casa de un ex senador y hoy aparece promoviendo que sus ministros asistan a “la cocina” de un lobista, lo que es un retroceso político que muestra la inconsistencia política de actual generación. Es fuerte la desazón en sectores medioambientalistas con la Ministra de Medio Ambiente por ejemplo.

En algunas críticas también se percibe fuerte molestia en actores de la coalición gobernante como ocurre con Partido Comunista, que “filtró” una supuesta autorización presidencial y esta semana sorprendió con su oposición a un proyecto de ley del Ministerio de Energía sobre Estabilización tarifaria y creación de subsidio a 850.000 familias vulnerables para amortiguar alza tarifaria; planteando que esa fórmula no ayuda a los sectores vulnerables y promoviendo “una renegociación de los contratos con empresas generadoras”.

Se viene un alza de las cuentas de electricidad según CNE que fluctúa entre 13% y 89% -después de 4 años de congelamiento de tarifas por el estallido social y la pandemia- y en el Senado, en especial en debate de ley de presupuesto 2024, transversalmente se exigió a Ministro de Energía que se extendiera mecanismo de protección tarifaria para las clases medias y un subsidio para las familias vulnerables.

Resulta extraño que diputados PC lideren el rechazo a un proyecto de ley del gobierno que fue acordado transversalmente en el Senado, que beneficia a casi el 85% de las familias, que crea un subsidio para 850.000 familias del 40% más vulnerable del registro Social de Hogares, y que coloquen énfasis que lo prioritario es “renegociar contratos con generadoras”, cuestión que tiene poca factibilidad práctica.

Pareciera que en este año electoral el PC será más díscolo y probablemente, además, levante presión porque se cumpla la condonación del CAE, que no se revoquen las pensiones de gracia para quienes tienen antecedentes penales.      

Además, en la Comisión de Salud del Senado el gobierno tuvo un traspié ya que la Comisión no aprobó la fórmula pro Isapre que promovió MINSAL para fijar las alzas de los precios bases de los programas, pero si aprobó en Transporte que a lo menos el 50% del subsidio espejo del Transantiago “debe destinarse a proyectos de modernización del transporte público regional mayor y menor” .

Lo relevante viene esta semana en la Cámara de Diputados donde se votará la Reforma Previsional en la Sala donde aún hay incertezas en la votación ya que la derecha ha decidido rechazar hasta la idea de legislar y el sector de diputados “no alineados” -que pueden viabilizar la tramitación en la Cámara- han levantado nuevas demandas en un tema complejo, donde lo principal que es mejorar las miserables pensiones que dan las AFP’s (entre $300 mil a $450 mil mensuales) ha quedado casi invisibilizado por el tema de que la nueva cotización vaya íntegramente a la cuenta individual y que la PGU -que en febrero sube a $214.000 mensuales- es la solución al tema previsional. Este debate público ha enredado la percepción sobre la reforma previsional y según un estudio de esta primera quincena solo 56% de la ciudadanía apoya que se despache en este gobierno.

Sin mencionar que se agudiza la crisis de seguridad con el aumento de homicidios y la sensación de miedo que hay en la mayoría de las familias y donde -a pesar de las perfomances discursivas del presidente Boric- hay una baja aprobación a la gestión gubernamental.

Estas primeras semanas de enero revelan que el país seguirá sin rumbo producto de una mala gestión gubernamental en estos distintos campos de la vida social, el pesimismo seguirá instalado en la sociedad, que no se revertirá el estancamiento económico y social; ya que los 2 años que quedan de gobierno puede que sean peor a lo que se ha vivido hasta ahora.