Por Antonia Paz
Publicaciones falsas aseguran que la vacuna de Pfizer provocaría esterilidad en las mujeres, pero expertos médicos e investigadores contradicen esa teoría con pruebas.
Varias publicaciones falsas difundidas miles de veces en redes sociales afirman que un investigador de Pfizer descubrió que su vacuna del COVID-19 provoca infertilidad en las mujeres. Pero expertos médicos independientes y la propia farmacéutica aclararon que no se documentó esterilización alguna durante los ensayos clínicos, y el perfil del investigador señala que éste no ha trabajado en la compañía farmacéutica estadounidense desde 2011.
"Jefe de investigación de Pfizer: la vacuna Covid es esterilización femenina", se lee en un artículo falso, cuya captura de pantalla se ha compartido en Facebook, Instagram y Twitter desde el 5 de diciembre de 2020. Otras publicaciones con afirmaciones similares han estado circulando en alemán y portugués.
El artículo cita al ex investigador de Pfizer Michael Yeadon dice que dejó la farmacéutica donde trabajó en investigación sobre alergias y respiración en 2011, es decir, ocho años antes del inicio de la pandemia de coronavirus.
Según la nota, Yeadon afirma que la vacuna COVID-19, que se administró por primera vez al público el 8 de diciembre, entrenaría al sistema inmunológico para atacar una proteína involucrada en la formación de la placenta, la sincitina-1, lo que provocaría infertilidad en las mujeres.
Pero así no es cómo funciona la vacuna de ácido ribonucleico mensajero (ARNm), desarrollada en cooperación con la empresa alemana BioNTech, según explicó experta en microbiología en la Universidad de York.
"La vacuna de ARNm funciona proporcionando al cuerpo una molécula de instrucción, como el ARNm, que le dice a las células humanas cómo sintetizar la proteína viral", dijo en un correo electrónico.
Las vacunas de ARNm, como la desarrollada conjuntamente por Pfizer y BioNTech, no contienen ninguna proteína del propio virus, sino las instrucciones para que el cuerpo sintetice una proteína viral para que el sistema inmunológico aprenda a defenderse de ella.
Esta nueva vacuna se diferencia de las vacunas regulares en que, en lugar de confrontar al sistema inmunológico con parte de un virus debilitado o desactivado para producir anticuerpos, le da un plano de una parte del virus que el cuerpo puede luego reconocer y combatir cuando se enfrente a él más tarde.
“La preocupación sobre la posibilidad de que los anticuerpos de proteína puedan atacar la proteína sincitina-1 de la placenta es muy pequeña".
Expertos dicen "si la afirmación sobre la sincitina fuera cierta, todas las mujeres que hayan sido infectadas previamente con COVID-19 serían infértiles, pero este no es el caso".
Una técnica conocida
La vacuna Pfizer-BioNTech es la primera en usar ARNm comercialmente. Pero, el ARNm se descubrió a principios de la década de 1960, y las pruebas en animales comenzaron en la década de 1990.
Esta vacuna "fue probada, debido al escrutinio, con estándares aún más altos en términos de cómo hacemos las cosas", dijo el director ejecutivo de Pfizer, Albert Bourla, durante una sesión informativa el 8 de diciembre.
Dervila Keane, portavoz de Pfizer, también dijo que "no hay datos que sugieran que la vacuna candidata de Pfizer BioNTech cause infertilidad".
"Se ha sugerido incorrectamente que las vacunas COVID-19 causarán infertilidad debido a una secuencia de aminoácidos muy corta en la proteína de pico del virus SARS-CoV-2, que se comparte con la proteína placentaria, sincitina-1".
Hasta ahora no se ha encontrado evidencia de efectos adversos en mujeres embarazadas.
La publicación también afirma que la vacuna contiene polietilenglicol, un ingrediente que, según el artículo, causa efectos adversos, incluida la muerte.
La vacuna contiene una variación de esa molécula, pero el aditivo "no está en una forma pura, es decir, como polietilenglicol, sino como una versión modificada químicamente de la misma probablemente lo haga apto para ser aplicada"-