¿Qué es Síndrome de Diógenes? Diógenes de Sinope, fue un filósofo griego de la escuela cínica, conocido por predicar la austeridad y el no atesorar apenas pertenencias. Vivía en un tonel y comía con las manos. Vivía aisladamente y al margen de todo convencionalismo social.
El Síndrome de Diógenes coge este nombre precisamente por esto último, las personas que lo padecen se encuentran aisladas socialmente y se suelen relacionar solo cuando van en busca de algo o cuando necesitan comprar comida o enseres para sobrevivir. También se le llama Trastorno de Acumulación, y se encuentra dentro del espectro de los Trastornos Obsesivos Compulsivos (TOC).
Se caracteriza fundamentalmente por la acumulación de objetos (ropa, periódicos, artilugios) y basura, que aparentemente son inservibles pero que para ellos tiene un sentido importante
Características y Sintomatología del Síndrome de Diógenes
Se encuentran socialmente aislados, suelen ser personas que viven solas y que han ido rompiendo progresivamente cualquier contacto con las personas de su alrededor. Esto favorece la exacerbación de la rigidez mental, es decir, la dificultad de aceptar ideas y criterios diferentes al suyo, aceptando solo como válidos sus propios argumentos, que justifican sus conductas no adaptativas.
Acumulación ingente de objetos: aparentemente estos son inservibles pero ellos les otorgan una importancia sobrevalorada y sienten que deben atesorarlos. Tienden a ordenarlos y clasificarlos por tipos y usos aunque son incapaces de diferenciar que objetos son relevantes y cuáles no. Para la persona que padece este síndrome todos ellos son imprescindibles.
Esta acumulación suele apoyarse en ciertos pensamientos intrusivos que tienen que ver con la posibilidad de no tener lo que necesitan en situaciones futuras de pobreza por ejemplo. Existe un temor intenso a fallar por ejemplo: a tirar algo que podría necesitarse, por lo que la acumulación es también un modo de no enfrentarse a la posibilidad de equivocarse. Esto último suele ser un rasgo que comparten las personas perfeccionistas y autoexigentes. Muestran además una muy baja tolerancia a las emociones negativas como la tristeza, la frustración, la sensación de vacío, etc.
Para ellos, los objetos no solo llenan un espacio físico, sino un vacío emocional muy grande y un deseo de apego que no saben cómo gestionar. Estas personas pueden haberse sentido rechazadas o dañadas, y a menudo subyace una creencia por debajo de la acumulación de que las relaciones con los objetos son más seguras que las relaciones con las personas.
Hay un abandono progresivo de la higiene personal y de las conductas de autocuidado como la alimentación y los hábitos saludables, que van de la mano con un abandono progresivo de los convencionalismos sociales. Precisamente esta falta de higiene suele hacer que la convivencia con los demás sea complicada y además, generalmente no tienen conciencia de que sus conductas acumulativas tengan consecuencias negativas para ellos o para las personas de su alrededor.
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Hay que tener en cuenta que la acumulación de objetos y basura, suele provocar la aparición de malos olores, plagas de insectos o de roedores, e incluso en casos extremos de acumulación, el exceso de peso en la vivienda puede provocar derrumbamientos.
Diagnóstico del Síndrome de Diógenes
Aunque suele presentarse en personas mayores tercera edad, puede aparecer en personas más jóvenes y se da casi con la misma frecuencia en hombres que en mujeres.
Hay que ser cuidadoso a la hora de realizar el diagnóstico pues suele estar relacionado con otro tipo de trastornos. Hay que tener en cuenta que una persona que padezca de una depresión mayor, por ejemplo, puede presentar síntomas parecidos como el descuido de la higiene personal y la alimentación, el aislamiento e incluso la acumulación de basura.
Aunque el Trastorno por Acumulación se encuentre dentro del espectro TOC Trastorno obsesivo compulsivo, no hay que confundirlo con el mismo. En este último hay un impulso irrefrenable hacia la repetición de una acción para poder aplacar una angustia muy intensa.
También podría confundirse el trastorno por acumulación con otros del espectro de las adicciones como por ejemplo, las compras compulsivas. Así como en el síndrome de Diógenes se atesoran los objetos por su gran valor emocional, en la adicción a las compras, una vez que han comprado los artículos, estos pierden todo el interés.
En cualquier caso, quizás lo relevante sería explorar cual es la motivación detrás de cualquier conducta de acumulación, pues esto nos dará la clave de la funcionalidad de la conducta para la persona que la lleva a cabo.
Tratamiento del Síndrome de Diógenes
Generalmente el tratamiento de este tipo de pacientes es complicado, en primer lugar, porque es poco frecuente que ellos acudan a tratamiento por su propio pie, y al encontrarse aislados, no suelen disponer de apoyo social familia, amigos que les motive a acudir a sesiones de terapia.
Aun así, si dispusiera de estos apoyos sociales, estos serían una pieza fundamental en el tratamiento y habría que comenzar por explicarles la naturaleza del trastorno para que lo entiendan y puedan colaborar en el tratamiento llevándolo lo mejor posible.
Parte del tratamiento se basaría en la modificación de los hábitos de descuido personal, conseguir que la persona vea la importancia de los mismos, se asee y se alimente adecuadamente. Esto puede favorecer la autoestima de la persona y funcionará como facilitador para el acercamiento al ámbito social y la inclusión en el mismo.
Por otro lado, la terapia irá enfocada a la comprensión de las motivaciones subyacentes y las carencias que padece el paciente. Consistirá en acompañarle para sanar sus miedos e ir ajustando sus creencias perjudiciales.
A veces, el tratamiento farmacológico es necesario para la intervención terapéutica, siendo lo más frecuente la administración por parte del psiquiatra de antidepresivos.