Este miércoles, el ex líder de la Central Nacional de Informaciones (CNI) Álvaro Corbalán publicó un obituario por el fallecimiento de Tito Fernández, conocido como El Temucano, quien murió el pasado 11 de febrero, confirmando además la amistad que tenía con el folclorista investigado por delitos sexuales.
El actual condenado a más de 150 años de cárcel por crímenes de lesa humanidad ocurridos durante la dictadura de Augusto Pinochet, escribió un mensaje en El Mercurio lamentando la muerte del músico nacional: “Ante el sensible fallecimiento del destacado folclorista y amigo ‘El Temucano’, don Humberto Baeza Fernández, me sumo a los sentimientos de pesar de toda su distinguida familia”.
El texto además confirma la amistad que ambos tenían y que durante años fue materia de sospecha. Esto luego de la revelación que hizo Pedro Lemebel en su crónica Guitarreando con la CNI del libro Serenata Cafiola (2008).
De hecho, en 2018 se leyó una supuesta carta que envió su esposa en su nombre, durante el lanzamiento del controvertido libro de Corbalán, lo que fue negado por Fernández.
Respecto a lo escrito por Lemebel, el músico recién fallecido dijo en su momento a Radio Bío Bío: “Yo nunca leí algo de Lemebel. Yo nunca lo conocí, y por ende él tampoco a mí. No sé por qué escribió de mí… Pudo haberme preguntado. No sé por qué lo diría, no tengo idea… Porque eso de que estaba en la televisión, ¿qué tiene de malo? No era el único que estaba en TV. La TV estaba llena de artistas en esos años”.
“Qué importa, que digan lo que digan, si lo que uno haga es lo que importa. Revisa mi obra y te vas a dar cuenta de que yo tengo buenas relaciones con todo el mundo… Y lo que digan, lo dicen de Tito Fernández, de mí no, porque no han venido a mi casa nunca… No sé de dónde sacaron eso. Tal vez son demasiado jóvenes”, agregó.
Su relación con Álvaro Corbalán
Sobre la relación que tenía con el ex líder de la CNI, Tito Fernández sostuvo a La Tercera en 2016 que “muchísimos (militares) eran más admiradores que siete del Temucano. ¿Y se los voy a prohibir? Muchos me quisieron ayudar. Álvaro Corbalán era un gran admirador. ¿Y cómo me lo hago a un lado? ¿Lo echo del camarín?”.
“Nunca me dijo si realmente me salvó la vida. Una vez me invitó a una gira con Pinochet y le dije que no. Otra vez me llamó para decirme que intentara parar una entrevista que yo había dado a la revista de la Vicaría, porque me iba a perjudicar. Hablé con la periodista y la sacaron. Otra vez hubo un simulacro de fusilamiento donde él tuvo algo que ver para que no me hicieran nada. Años después, le fui a preguntar si él me salvó la vida. Solo se sonrió”, añadió.
En ese sentido, Fernández aseguró que con Corbalán se conocían, “porque él era músico, iba a las peñas y era fanático de El Temucano. Un milico más fanático de El Temucano. Nadie sabía lo que venía”.
Sobre esta relación, el intérprete profundizó sus dichos en la radio: “No te podíai negar, poh (en la época de dictadura). ¿Cómo te ibai a negar? No te puedes negar, porque yo tenía una tarea, que era mantener vivo el Canto Popular costase lo que costase”.