La pugna entre el fiscal nacional de Jorge Abbott y el regional de O'Higgins, Emiliano Arias, pareciera no haber llegado a su fin. Luego de casi nueve meses suspendido, y un fallido intento de remoción, el persecutor de Rancagua aseguró no descartar la presentación de acciones legales contra su superior.

 

Las declaraciones las entregó este viernes a Cooperativa, y a un día que la Corte Suprema comunicara las razones del por qué rechazó la solicitud de remoción que presentó en su contra el nacional, señalando, entre otras cosas, que las causales esgrimidas por Abbott no tenían la gravedad necesaria para la expulsión.

 

"Tengo que reunirme con mi abogado y evaluar ese segundo escenario. Lo que sí, no será 'borrón y cuenta nueva'", señaló el regional. Uno de los más críticos en el fallo de la Suprema fue el ministro Carlos Künsemüller, quien realizó una prevención especial indicando "que, del análisis de los antecedentes leídos y oídos, aparece que varios de los casos denunciados como de gravedad extrema y conducentes a la destitución del funcionario acusado, son más bien infracciones de menor entidad, de bagatela e, incluso, de índole meramente doméstica-anecdótica, como el cargo referido al traslado de unas aves muertas en su vehículo".

 

En esa línea, Arias recalcó que, si bien la presentación de una posible acción está en estudio, "sí tengo absolutamente decidido que esto no puede ser 'borrón y cuenta nueva', y con este triunfo que obtuvimos me quedo absolutamente tranquilo, porque ahí sí que no serviría para nada (lo ocurrido), no produciría ningún cambio". "Como abogado tengo que ejercer todas las acciones que estén a mi alcance para, por un lado, reparar el daño personal, y por otro reparar el daño que se le ha hecho a la institución, y eso se obtiene a través de los tribunales de justicia", agregó.

 

Arias también aseguró además que dicho camino podría ser tomado tanto dentro o fuera de la fiscalía: "Yo no veo la jerarquía de manera de que no pueda ejercerse acciones legales dentro de la institución respecto el jefe (...) el Ministerio Público no es una institución militar". Y es que a casi dos semana de haber regresado, la permanencia de el regional al interior del ente persecutor sigue en suspenso, ya que fue el mismo Arias el que indicó que no descarta renunciar. Frente a esto, Arias aseguró que dicha decisión la tomará entre febrero y la primera semana de marzo. "No puedo mantener en la incertidumbre a las personas que trabajan en la región", zanjó.