Oh I'm just counting

FMI dice que Chile puede seguir creciendo, pero “no como en la década de 1990”

El Fondo Monetario Internacional (FMI) afirmó que Chile puede crecer, pero no como lo hizo durante la década de 1990.

El organismo explicó que parte de los temas socioeconómicos que se discuten en el país, como sostenibilidad fiscal, adecuación de las pensiones y préstamos universitarios, se pueden atribuir a “la desaceleración del crecimiento del país durante las dos últimas décadas”.

En esa línea, señaló que en los 90′, Chile crecía a un ritmo promedio anual de 6,2% y que se consideraba que Chile era “modelo de éxito económico en América Latina”.

Sin embargo, dicha tendencia perdió fuerza y en los 2000, la cifra de crecimiento bajó hasta un 2%.

Crecimiento económico en Chile/FMI

Haciendo la comparación con países similares, “se deduce que hay margen para que crezca a mayor velocidad. Países de ingreso más alto que en su momento tuvieron un nivel de ingreso comparable al de Chile crecieron en torno a una tasa del 2,9% anual”.

Sin embargo, el FMI remarcó que Chile presenta ciertas dificultades que las otras economías “no tuvieron en la misma fase de desarrollo, como son el envejecimiento demográfico y una desaceleración de la economía mundial, lo que dificultan que el país alcance ese ritmo de crecimiento”.

En esa línea, apuntó al envejecimiento de la población. De acuerdo a una proyección de la ONU, “la población en edad de trabajar de Chile (de 15 a 64 años) crecerá tan solo un 0,15% anual en el período 2025-2035. Con un incremento moderado de la participación en la fuerza laboral, es probable que el empleo avance a una tasa anual del 0,2%-0,3%, por debajo del 0,8% observado en el grupo comparativo”.

Por otro lado, el organismo señaló que las tendencias tecnológicas mundiales “también podrían mermar las perspectivas de Chile”.

El Fondo explicó que para que Chile pueda aumentar su potencial y “esquivar estos lastres para el crecimiento”, la solución es “profundizar en medidas estructurales por el lado de la oferta, como proponíamos en los mensajes sobre políticas de nuestro último informe sobre la economía chilena”.

“En primer lugar, es imprescindible mejorar la eficiencia de los requisitos regulatorios. Por poner un ejemplo extremo: se puede tardar unos 10 años para conseguir los permisos y gestionar la burocracia para poner en marcha un gran proyecto minero. Agilizar este lento proceso contribuiría a reducir los obstáculos para la inversión y a fomentar la adopción de nuevas tecnologías. Del mismo modo, modernizar la regulación relativa al transporte marítimo podría reducir los costos comerciales y mejorar la competitividad de Chile”, indicó.