Un grupo de francotiradores dispararán a más de 10.000 camellos desde helicópteros para evitar que beban demasiada agua y causen estragos en Australia, país fuertemente afectado por la sequía.
De acuerdo al diario británico Independent, la operación -que comenzará este miércoles- fue decidida por los líderes de Anangu Pitjantjatjara Yankunytjatjara (APY), una extensa área con un gobierno local aborigen ubicada en la región del noroeste del estado australiano de Australia Meridional.
La medida se adoptó tras una serie de quejas de los lugareños, quienes acusaron que los animales han causado estragos en la comunidad debido a que irrumpen cualquier fuente de agua posible, como tanques e incluso viviendas.
“Hemos quedado atrapados en condiciones apestosas e incómodas, sintiéndonos mal, porque los camellos están entrando y derribando cercas, entrando a las casas y tratando de llegar al agua a través de sistemas de aire acondicionado”, dijo Marita Baker, miembro de la comunidad de APY, consignó el medio The Australian.
Algo similar señaló un portavoz del Departamento de Medio Ambiente y Agua del Sur de Australia, quien se refirió al problema.
“Esto ha resultado en daños significativos a la infraestructura, peligro para las familias y las comunidades, mayor presión de pastoreo en las tierras APY y problemas críticos de bienestar animal, ya que algunos camellos mueren de sed o se pisotean entre sí para acceder al agua”, dijo el vocero del organismo gubernamental a news.com. au.
“En algunos casos, los animales muertos contaminaron importantes fuentes de agua y sitios culturales”, añadió.
Se espera que la operación para controlar la población de camellos dure cinco días. Sus cadáveres se dejarán secar antes de quemarlos o enterrarlos.
Los medios australianos explican que si no se llevara a cabo este sacrificio masivo, la población de camellos se duplicaría cada 8 o 10 años. Se estima que el número total de camellos en el país actualmente asciende a 1.2 millones.
Estos animales además son objeto de preocupación por las emisiones de gases de efecto invernadero, ya que emiten metano equivalente a una tonelada de dióxido de carbono por año, aseguró Tim Moore, director ejecutivo de los especialistas en agricultura de carbono RegenCo, quien dijo que esto es como si se sumaran 400 mil automóviles en una carretera.
Cabe destacar que los camellos fueron introducidos en Australia desde India y Afganistán durante el siglo XIX, principalmente para ser utilizados en los rubros del transporte y la construcción.