Sabemos que el mundo de los niños no es igual al nuestro, el de los adultos. Ellos son nativos digitales, es decir, desde que nacieron, tuvieron acceso a dispositivos tecnológicos, los que manipulan con facilidad y sin la necesidad de que nadie les enseñe nada.
Ocupar las redes sociales para educar: la revolución tecnológica que pretenden crear a nuestro favor
Por Teresa Frías K.
Sin duda las redes sociales hoy en día influyen quizás más que los medios de comunicación de masas, y para qué decir que la gente ya no ocupa su teléfono para hablar, si no que comunicarse a través de las ya mencionadas redes.
Twitter, Facebook e Instagram son las más populares sin duda. Entre los jóvenes es una de las herramientas más importantes para expresarse ya sea en temas sociales o políticos, y así al menos qued{o demostrado en Chile en la última elección presidencial y parlamentaria.
Pero, qué pasaría si estas herramientas se pusieran a disposición de los estudiantes. Sabemos que la juventud y sobre todo los más pequeños han crecido con la tecnología a su lado y que sin duda entienden más que un adulto como moverse a través de ella.
¿Cómo incorporamos las redes sociales en la educación?
Este mundo virtual en el que viven los menores y los jóvenes, es sin duda una plataforma en la que el conocimiento y la información de cualquier tema, está a un par de clicks de distancia, situación que muchas veces, por lo tradicional de los sistemas educativos que rigen en nuestro país, no se les saca provecho en el ámbito de la formación.
El Dr. Marcelo Rioseco, académico de la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad Católica del Maule (UCM), reflexionó sobre cómo integrar la tecnología en la educación, en su condición de experto en uso de tecnología aplicadas a la educación.
“La pregunta es cómo la escuela, que es muy tradicional, incorpora estas nuevas formas de comunicación e interacción y las orienta de una manera educativa. Eso es algo que está en proceso”, puntualizó el especialista.
Para dar luces sobre el tema, el Dr. Rioseco propone repensar la escuela, ya que tal como lo explicó, “la frontalidad donde el profesor es el que maneja la información, ya no se sostiene, porque los datos están disponibles en todo momento, por lo que el papel del profesor no es entregar el contenido, sino más bien enseñar a navegar, encontrar y darle un sentido más humano a esta interacción en redes sociales”, reflexionó.
En concreto, el académico UCM plantea que el profesor interactúe con sus estudiantes en las redes sociales, creando por ejemplo a través de una fan page de Facebook, comunidades cerradas, o grupos de WhatsApp, jugando un rol de mediador de los contenidos que están disponibles en internet. “La escuela debe prepararse para asumir este papel de liderazgo dentro de las redes sociales, tomando en cuenta que los objetivos de aprendizaje, no solo en lo que se refiere a materia, sino que también los transversales, tales como enseñar ciudadanía o potenciar el que la gente se haga responsable de sus opiniones y que participe de manera comprometida. Eso la escuela también tiene que entregarlo y ser orientadora”, analizó.
“El estudiante debe saber que su interacción con sus pares, en este mundo virtual, no tiene por qué estar tan lejana a lo que está enseñando la escuela”, agregó el Dr. Marcelo Rioseco.
La tecnología como aliado en el aprendizaje
Además de ser crítico con la aplicación de las nuevas tecnologías en la educación, el experto en la temática, ve en esta plataforma, la posibilidad de mejorar las evaluaciones de aprendizaje. “Las pruebas estandarizadas están demasiados presentes, todas se realizan por esa vía. Como el SIMCE y la PSU, lo que restringe a medir todo en preguntas que son cerradas, porque no tienes posibilidades de procesar preguntas abiertas, por lo que la tecnología nos puede dar mayores riquezas en ese aspecto, permitiendo evaluar los conocimientos de maneras más sofisticadas y precisas” señaló.
A modo personal, el Dr. Rioseco, comenta que en los cursos que imparte en la UCM, ya está aplicando el uso de las redes sociales y la tecnología, además del aula virtual, espacio que tiene la Universidad para que los profesores interactúen online con sus estudiantes.
Concretamente explica que está trabajando en un proyecto donde se virtualice en la misma sala de clases diferentes procesos, dando a entender que actualmente la pizarra electrónica es un paso intermedio, pero que esto podría evolucionar a un espacio que sea presencial y virtual al mismo tiempo, donde se eduque en el espacio virtual y en el presencial se fomenten otros aprendizajes y se apoye lo señalado en el aula virtual.
Para terminar el Dr. Marcelo Rioseco, indicó que “mis cursos son semipresenciales, mis clases están en la plataforma virtual, donde los estudiantes pueden tomar estas actividades y las hacemos en clases. Les doy la opción de que trabajen tanto virtualmente como presencialmente”, finalizó.
¿Sirve el mecanismo?
Frente al tema, el experto en educación Ricardo Valdés de la Universidad de Chile, destacó que “sin duda internet ha cambiado tanto nuestras vidas que no podemos mirar hacia otro lado. Y las redes sociales, que están en boca de todos, han venido para quedarse”.
A ello, agregó que “por eso, es importante que en los centros educativos se conozcan y se usen de forma que los alumnos puedan beneficiarse de ellas para sus estudios y desarrollo personal”, agregando que “las redes sociales son las herramientas perfectas para que fluya la comunicación entre alumnos y profesores. Los jóvenes, al estar tan familiarizados con ellas, se sentirán más cómodos y menos obligados a tener una relación más estrecha con sus docentes y además, todo fluirá con más naturalidad”.
“Pero no sólo sirven para la relación profesor-alumno en un mismo centro, sino que son básicas para comunicarse con expertos en materias concretas u alumnos de otros centros. Hacen posible que los estudiantes desarrollen habilidades y aptitudes tales como la socialización, el trabajo en equipo o la importancia de compartir”, puntualizó.