Este sábado y domingo millones de chilenas/os irán con su voto a escribir un mejor futuro para el país.
Entre la fragilidad, la incerteza y el abandono en que se ha vivido la pandemia aún hay esperanzas de mejorar nuestra democracia para que ella sea una convivencia social donde predominan la solidaridad, la cooperación y el respeto a la dignidad de tod@s.
Un mal gobierno de derecha, desconectado con la realidad, con una clase empresarial que nos comunica que se debe trabajar más allá de los 65 años, que insiste en que la gente prefiere los bonos; esas ofensas nos debieran movilizar y levantarnos para ir a votar por quienes quieren hacer cambios.
Las ideas conservadoras, del neoliberalismo que queden en el distrito 11, pero en el resto del país en las regiones y comunas donde hay familias de ingresos medios y un amplio abanico de familias vulnerables que han visto perder su empleo y caer sus ingresos debiera predominar el apoyo a los sectores democráticos.
Un mundo democrático aún disperso y dividido; en ese sentido ha sido una buena noticia que la Oposición haya hecho una exigencia unitaria de más apoyo fiscal para las familias y para las pequeñas empresas –especialmente del turismo, cultura, gastronomía, servicios que lo han pasado mal estos 14 meses-.
Aquí los super ricos ganaron durante la pandemia y el resto del país se empobreció y vive en la incerteza, ese Chile frágil, desprotegido debe dar paso a otro Chile al de la solidaridad, al que ayuda más a las familias inscritas en el Registro Social de Hogares, especialmente al 85% de familias que tiene entre 1 a 3 miembros.
Dar más a los que menos tienen, tener una real red de protección social para los que seguirán desempleados es una urgencia.
Más descentralización, más protagonismo a los Concejos Municipales, pero también más transparencia local y más fiscalización de un órgano dedicado a fiscalizar a los Municipios como una Superintendencia de Municipios.
Hay mucho que cambiar en el país, pero eso debemos hacerlo con participación ciudadana y eso parte con una masiva expresión ciudadana este fin de semana.
Vamos a votar, otro Chile es posible.