“Soy miembro de la Academia de Cine de Argentina, y de la Academia Española. La vi cuando estuvo nominada a los Goya (2021), y a mí me encanta la película. Y si ves los otros documentales, es la película que rompe el molde, la película diferente”, señala.
“Tiene un valor extraordinario, porque tiene la manera más inteligente, en relación a las demás nominadas, de codificar una situación social, que es: qué pasa con los adultos mayores, cómo es la vida de un adulto mayor y qué pasa cuando llegas a ese lugar. Tiene una profundidad enorme. La veo en ese camino que tuvo el cortometraje Historia de un Oso y Una mujer fantástica”, asegura.
“Claro que le veo posibilidades (a El Agente Topo), por supuesto. Después, depende de millones de cosas”, explica sobre el certamen.
“Una vez le escuché decir a un jefe de prensa: tú puedes hacer que los académicos vean la película, con publicidad y acciones de prensa; lo que no puedes lograr es que les guste, ese es un acto de profunda intimidad. Y a mí me es difícil pensar que alguien que vea El Agente Topo no se conecte emocionalmente… Pero también es verdad que alguien que vea My Octopus Teacher por ahí no quiera volver a comer mariscos en su vida… A mí no me pasó”, ríe.
Para el trasandino, sin dudas se trata de una versión especial de los Óscar que será recordada por los efectos de la pandemia, aunque desestima que la coyuntura sanitaria se haya traducido en un desinterés (tal como especulan algunos) por las principales nominadas.