Tom Scott, creador de un popular canal de YouTube, se introdujo en un complejo de túneles subterráneos secretos construidos durante la Segunda Guerra Mundial en Invergordon (Escocia, Reino Unido), donde hace cuatro años se batió el récord del eco más largo del mundo —112 segundos de duración— mediante el disparo de una bala, informa el portal Gizmodo.
La estructura subterránea, creada entre 1939 y 1942 en roca sólida en lo profundo de una ladera, albergó originalmente una red de tanques de almacenamiento de petróleo de 237 metros de largo con paredes de 45 centímetros de espesor y cabida para 25 millones de litros capaz de resistir bombardeos de la fuerza aérea alemana.
En este lugar, el 'youtuber' y su equipo lograron igualar aquella plusmarca sonora. Tras producir un ruido potente, registraron los decibelios y la reverberación con ayuda de varios micrófonos extremadamente sensibles.