Una enfermedad que se estimaba controladfa en las grandes urbes y sobre todo de países avanzados en salud sexual, ha revivido con desastrozas consecuencias. Se trata de una variante de la gonorrea que no responde al tratamiento habitual en estos casos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) fue la primera hace algunos meses en dar el aviso sobre la aparición de un peligroso tipo de gonorrea resistente a los antibióticos.
Médicos británicos confirman la detección del “peor caso” de esa enfermedad de transmisión sexual en todo el mundo, ya que no ha sido posible curarlo con antibióticos de primera elección. Lo grave es que en su primera etapa es indetectable y se puede trasmitir con facilidad.
El Servicio Nacional de Salud del Reino Unido (NHS) señaló que el caso alfa se trata de un hombre que tenía una relación estable, pero se contagió de la “superbacteria” a inicios de año durante un encuentro sexual ocasional con una mujer en el sudeste asiático.
Ninguno de los tratamientos habituales para la enfermedad, ha producido efectos que la detengan o eliminen. Los médicos han asegurado que el paciente no responde a los antibióticos tradicionales, esto es una combinación de azitromicina y ceftriaxona.