El político español Íñigo Errejón, portavoz parlamentario del partido Sumar, que gobierna en coalición con los socialistas en España, y referente del Frente Amplio en Chile, dimitió de todos sus cargos tras unas denuncias anónimas de violencia machista, vertidas en redes sociales, que el propio político admitió que son ciertas.
El político madrileño, de 40 años de edad, divulgó una carta en la red social X en la señaló haber llegado "al límite de la contradicción entre el personaje y la persona", sin dar muchos detalles concretos.
Su renuncia, aceptada por Sumar, llega en medio de acusaciones anónimas de violencia machista por las que la propia dirección abrió ya un proceso interno.
Tras tener conocimiento de ellas, el partido se puso en contacto con el propio Errejón, que, según las fuentes, confirmó los hechos, por lo que se tomó la decisión de exigirle el acta de diputado.
La renuncia se produce poco después de que la periodista Cristina Fallarás publicara en su perfil de Instagram un testimonio anónimo que en el que se hablaba de un diputado (cuyo nombre no se citaba) al que se definía como "un maltratador psicológico" y de que diferentes usuarios relacionaran ese testimonio con el nombre del ya exdirigente de Sumar y comenzaran a compartir otros relatos.
La propia comisión ejecutiva de Sumar reconoció haber aceptado de forma unánime su dimisión -después de que el propio Errejón enviara un comunicado a este órgano de dirección-, al tiempo que anunciaba que ya había abierto una investigación para recabar información sobre el caso.
La vicepresidenta segunda del Gobierno y líder de Sumar, Yolanda Díaz, dijo que la dimisión es el resultado del proceso abierto por esa formación ante los testimonios sobre posibles casos de violencia machista.
En un mensaje de la red social X, aclaró que "esta semana, Sumar ha iniciado un proceso para recabar información sobre los testimonios surgidos en redes sobre Íñigo Errejón. Como resultado del proceso, hoy deja todos sus cargos".
En el mensaje, Díaz añade que el compromiso de esa formación "contra el machismo y por una sociedad feminista es firme y sin excepciones".
Reacción del PSOE
El PSOE, aliado de Sumar, y Podemos, partido de izquierdas en el que militó Errejón anteriormente, también reaccionaron y lo hicieron posicionándose a favor de las víctimas y mostrando su preocupación por las acusaciones contra Errejón.
El partido expresó su preocupación por las acusaciones, subrayó que va a estar "a favor de una política feminista que actúe con dureza contra los que la ejercen" y remarcó que siempre "va a estar con las víctimas de violencia machista".
La eurodiputada de Podemos y exministra de Igualdad Irene Montero pidió, tras conocerse la renuncia de Errejón y las denuncias anónimas, cambiar la dinámica de la "cultura de la violación".
La dimisión llega en un momento político delicado
La dimisión de Errejón llega en pleno proceso de reestructuración de su partido Sumar, que tiene prevista la celebración de una asamblea a mediados de diciembre para definir su nueva estructura organizativa y su hoja de ruta, una tarea en la que tenía hasta ahora un papel destacado el propio Errejón.
Sumar está en periodo de transición tras la renuncia de Yolanda Díaz a continuar como líder de Sumar por los malos resultados de las elecciones europeas.
Todo ello en un momento político muy delicado, en plenas negociaciones entre Sumar y el PSOE para los presupuestos de 2025, donde ambas formaciones siguen muy alejadas en asuntos como la política fiscal y la vivienda, y tras el enfado de los socialistas con Sumar después de que estos últimos votaran con la oposición conservadora del PP el pasado martes dos iniciativas en el Congreso español.
Por su parte, el PP pidió explicaciones a la líder de Sumar por la posible vinculación de la dimisión de Errejón con acusaciones de violencia machista que "parece ser que eran un secreto a voces en todos los ámbitos de la izquierda".
"Lo sabían, lo taparon, lo consintieron", denunció la vicesecretaria de Movilización y Reto Digital de partido, Noelia Núñez, en un video remitido a los medios de comunicación en el que censuró el "feminismo hipócrita" del Gobierno español.