Este lunes, se conocieron detalles sobre la declaración del comandante en jefe del Ejército, general Javier Iturriaga, en el marco de las investigaciones que encabeza la fiscal Ximena Chong por presuntos delitos de lesa humanidad durante el estallido social.
Cabe señalar que la persecutora ya se ha entrevistado con los exministros de Interior, Andrés Chadwick y Gonzalo Blumel, además del expresidente Sebastián Piñera, quien declaró durante dos jornadas seguidas.
En el caso del general Iturriaga, el comandante en jefe de la institución recibió a la fiscal el pasado 3 de abril en dependencias del Edificio Bicentenario del Ejército, en donde testificó en calidad de testigo.
Según recoge La Tercera, Chong buscaba dilucidar cuáles y cómo se impartieron instrucciones, reuniones y todo lo relacionado con el resguardo del orden público.
En la declaración, Iturriaga recordó que -telefónicamente- fue informado por el entonces comandante en jefe del Ejército, Ricardo Martínez, de que probablemente sería designado por el Presidente Piñera como jefe de la defensa nacional, por lo tanto, tenía que prepararse. Posteriormente, fue el propio jefe de Estado quien se comunicó directamente con él.
Al momento de llegar a La Moneda, Iturriaga relató que sostuvo una reunión con el propio mandatario, además del ministro de Defensa, Alberto Espina, el titular de Interior, Andrés Chadwick y el general director de Carabineros de la época, Mario Rozas.
"El Presidente fue muy escueto. Habló unos 10 minutos. Hizo de alguna manera un análisis de lo que estaba ocurriendo, por qué había llegado a esa decisión. Que esta alteración al orden público había venido en aumento durante la semana y ese día el hecho del incendio en el edificio Enel, lo había alarmado y había sido el punto de quiebre en la gravedad que analizaba", relató.
"Esa gravedad era compartida con la intendenta, Ministerio del Interior, y él había llegado a la convicción de que era necesario decretar el Estado de Excepción, con todo lo que significaba, que era primera vez desde el 90'", añadió.
Iturriaga recordó además que "fue complejo tomar esa decisión, porque era difícil saber el punto exacto de si estaban realmente sobrepasados los carabineros o no".
"Recuerdo bien que después de hacer todo este análisis y explicar las atribuciones que tenía por ley, (el Presidente) reconoce que es muy difícil la tarea que me está asignado, porque comprendiendo la labor primaria del Ejército, que no es el Orden Público, y que Carabineros estaba sobrepasado", explicó.
"Entiende que es algo muy difícil lo que me encargaba, que era retomar el orden público y al mismo tiempo respetar los DD.HH, que es difícil este balance de imponer el orden y, por otro lado, respetar la ley", complementó.
El comandante en jefe del Ejército fue consultado por la polémica frase que emitió Sebastián Piñera en medio de una conferencia de prensa, donde aseguraba que "estamos en guerra contra un enemigo poderoso". Posteriormente, el propio general Iturriaga fue consultado por los dichos del entonces mandatario, respondiendo "Soy un hombre feliz, no estoy en guerra con nadie".
"El Presidente participó ese domingo del briefing diario a las 20.00 horas. Fue a mi puesto de mando, ahí se le expuso la situación, se le hizo un briefing de las circunstancias y ambiente, de lo que ocurrió durante del día. Él tomó nota y después de eso me pidió que lo acompañara al punto de prensa, pero no hubo interacción con él de lo que iba a decir, nada”, relató.
"No teníamos evidencia, no teníamos inteligencia concreta"
En aquella oportunidad, el mandatario había hablado de la existencia de grupos organizados, por lo que el general fue consultado si manejaban información al respecto.
“Nosotros suponíamos una organización detrás de esto, pero no teníamos evidencia, no teníamos inteligencia concreta”, sinceró.
En relación a la respuesta de Iturriaga a los dichos del mandatario, diciendo que "no estaba en guerra con nadie", desmintió algún llamado de atención, sin embargo, agregó que "hubo una conversación del porqué había respondido de esa manera. Seguimos conversando todos los días en ese momento”.
Finalmente, sobre la relación con el expresidente, el comandante en jefe del Ejército la definió como una relación de confianza "en tiempos extremadamente complejos y siento que yo era de alguna manera un asesor más para él. Después de eso no hemos cultivado ningún otro tipo de relación más que en el tiempo digamos, él me ratificó su confianza y me designó en dos cargos que son de confianza presidencial”.