Foto Portada.- Monseñor Santiago Silva presidente de la Conferencia Episcopal.
"Fue un año que la Iglesia en Chile difícilmente olvidará". Es la conclusión de la Conferencia Episcopal, organismo que publicó en su página web un resumen con los principales acontecimientos vividos por el clero durante un 2018 marcado por las investigaciones a los abusos sexuales a menores por parte de religiosos y la visita del Papa Francisco al país.
"Año de expresiones repetidas de dolor y vergüenza, de inéditas escenas de incautaciones y registro de dependencias eclesiásticas, y de sanciones drásticas a obispos y sacerdotes chilenos dispuestas personalmente por el Papa", comenta el episcopado nacional.
Estas últimas como la salida de algunos obispos investigados de sus respectivas diócesis, sumado a la expulsión del sacerdocio de los ahora ex presbíteros Cristián Precht y Fernando Karadima, además del ex arzobispo de La Serena Francisco José Cox., estos tres últimos por los abusos sexuales y de conciencia que cometieron durante sus años de servicio ministerial. Seguido de ello, la institución religiosa recordó la "sorpresiva convocatoria del Papa a los obispos, pocos meses después de concluir su visita apostólica a Chile".
Continúa: "se reveló el impacto de la misión encomendada al arzobispo de maltés Charles Scicluna en el mes de febrero", quien llegó a Chile para investigar el supuesto encubrimiento del cuestionado entonces obispo de Osorno Juan Barros, acusado de guardar silencio ante los abusos de Karadima. Caso que terminó opacando la venida en enero de Francisco al país.
Pero Scicluna, quien estuvo acompañado del oficial de la Congregación para la Doctrina de la Fe, Jordi Bertomeu, no solo se encontró con testimonios relacionados al ex párroco de El Bosque, sino que una serie de otras denuncias que obligaron a los enviados papales a volver a Chile en el mes de mayo.
"La crisis vivida suscitó un amplio proceso de reflexión y discernimiento en las comunidades, que condujo a los obispos a realizar una asamblea extraordinaria a fines de julio, al término de la cual expresaron su intención de colaborar con las labores investigativas de los tribunales estatales", señaló la Conferencia Episcopal.
Del mismo modo, destacaron el aumento "de las facultades del Consejo Nacional de Prevención" y el compromiso de "escuchar a las víctimas y a elaborar documentos sobre buen trato para clérigos y agentes pastorales, entre otras decisiones y compromisos".
Por último, el organismo que reúne a todos los obispos y administradores apostólicos del país, manifestó que "la situación de migrantes y la Araucanía han sido temas de gran prioridad para la acción de la Iglesia, traducidas en diversas iniciativas en diálogo con la sociedad civil".
"La preocupación por acompañar a las personas privadas de libertad se sintetiza en las emotivas escenas del Papa Francisco en su visita al centro penitenciario femenino", concluyó.