Oh I'm just counting

Liderazgo probado para nuevos desafíos. Por Helia Molina. Decana Facultad de Ciencias Médicas Universidad de Santiago de Chile

“Formando Personas, Transformando el País” es el lema de la Universidad de Santiago, que en estos días está cumpliendo 169 años de existencia, partiendo como Escuela de Artes y Oficios, luego Universidad Técnica del Estado y hoy Universidad de Santiago de Chile.
 
Para quienes nos hemos incorporado en los últimos años a la Usach, sin duda que existen características que  impresionan y dan un sello especial y único a esta comunidad, como su especial épica y sentido de pertenencia relacionado con el rol de esta Universidad en la permanente lucha por los valores de la democracia y la dignidad humana. Además, por la búsqueda incesante de la excelencia en la educación impartida a los estudiantes de pre y post grado.
 
Es una Universidad donde la educación inclusiva no es un discurso. Hace 12 años que se desarrolla el Programa Propedéutico “Nueva Esperanza, mejor Futuro”, iniciativa que, a partir de que la inteligencia humana esta homogéneamente distribuida en todos los estratos sociales, en todas las razas y en todas las culturas, da oportunidades a cientos de jóvenes de colegios vulnerables, pero con excelente rendimiento académico, para ingresar a la Universidad de Santiago. El programa PACE del Mineduc se inspira en esa iniciativa.
 
Existen cupos especiales para estudiantes con discapacidades y adecuaciones progresivas e infraestructura y dispositivos para hacer que esta inclusión sea posible. Se ofrece un importante apoya a los estudiantes en sus primeros años de Carrera, a través del Programa de Acceso Inclusivo, Equidad y Permanencia (Paiep), que permite salvar las dificultades provenientes de una formación escolar deficiente, acortando brechas cognitivas, mejorando la calidad de vida y autoeficacia del estudiantado.
 
Por otra parte, las políticas de respeto a la diversidad sexual e identidad de género hacen de la Usach la primera universidad donde el nombre del estudiante es coherente con su identidad. La educación no sexista es un motivo de reflexión permanente en las distintas Facultades y el enfoque de género se trabaja con toda la comunidad a través de postítulos y seminarios gratuitos.
 
La investigación, la tecnología y la innovación son ejes transversales de desarrollo, destacándose a nivel mundial y con un permanente apoyo e incentivos para estudiantes y académicos. Cada día existen más postgrados acreditados, lo que sin duda genera un semillero de talentos que genera círculos virtuosos de docencia e investigación de la más alta calidad.
 
Asimismo, la cultura se encuentra en permanente desarrollo a través de las artes, donde los estudiantes, académicos y funcionarios administrativos acceden a un menú extenso e intenso de actividades musicales, actorales y plásticas, que permiten dentro de la Usach abordar el desarrollo integral de los estudiantes y de toda la comunidad universitaria.
 
Sin duda que siempre existirán nuevos desafíos, pero no conozco otra institución de educación superior que valore y respete el rol y aporte de los estudiantes en hacer más y mejor universidad, estudiantes conscientes de sus derechos y sus causas. La Usach escucha e interactúa con los estudiantes, estos son parte fundamental de las instancias de trabajo a nivel institucional con derecho a voz y voto, como es el caso del Consejo de Facultad de Ciencias Médicas que dirijo.
 
Otro aspecto a destacar es la vinculación con el medio. En distintos periodos la Universidad se abre a la comunidad y nos nutrimos mutuamente, las Facultades salen de sus muros y se adentran donde la gente vive, trabaja, ama, se entretiene y forma a sus hijos e hijas. Nuestros estudiantes, conjuntamente con los académicos, despliegan su amor al servicio público y su solidaridad, poniendo a disposición de la gente sus conocimientos, competencias y el tiempo necesario.
 
En la Facultad de Ciencias Médicas desarrollamos diversas actividades a través de operativos de atención en salud, talleres de capacitación y conversatorios. Además, las actividades culturales están abiertas a la comunidad y a los colegios, como es el caso del Planetario, único en sus características en América Latina.
 
Todas las Facultades hemos crecido y avanzado mucho en la última década, se han creado nuevas Carreras y nueva infraestructura. Por supuesto que aún hay temas pendientes, pero no cabe duda que el Rector Juan Manuel Zolezzi ha sido un gran luchador, con la determinación de llevar a la Usach al más alto nivel nacional e internacional.
 
Fue él quien logró avanzar en la ley de incentivo al retiro que permite beneficiar a muchos funcionarios y funcionarias. En los últimos cuatro años, la Usach, a través de su Rector, ha jugado un papel preponderante y con gran liderazgo en los logros de gratuidad, Ley de Educación Superior y Ley de Universidades Estatales.
 
No olvido su figura marchando con los estudiantes para defender la salud como un derecho,  lucha que también dio como presidente del Consorcio de Universidades Estatales de Chile (Cuech), como vicepresidente ejecutivo del Consejo de Rectores de las Universidades Chilenas (Cruch) y como presidente de la Asociación de Universidades del Grupo de Montevideo (AUGM).
 
Todos estos factores me hacen pensar que nadie mejor que él podrá conducir nuestro plantel en los próximos cuatro años, donde todos los procesos en curso deberán consolidarse para avanzar en la democratización de la universidad, mejorar nuestras capacidades docentes y de investigación, lograr una vinculación nutritiva y cariñosa con el medio, así como posicionarnos como un centro de educación superior que aporta vigorosamente al desarrollo de un país moderno, con tecnología de punta, innovador, solidario, creándose las mejores oportunidades para reducir las brechas de inequidad y avanzar para una sociedad más justa y con igualdad de oportunidades.