Funcionarios de la Policía de Investigaciones (PDI) detuvieron a tres funcionarios activos del Servicio Nacional de Aduanas en el marco de la "Operación Columbia II", por los delitos de asociación ilícita, cohecho, soborno, fraude al Fisco, contrabando y lavado de Activos.
En el operativo se registraron siete inmuebles en las comunas de Lampa, San Miguel, Santiago y Pudahuel, Región Metropolitana, entre ellos, cuatro dependencias de Aduanas. De igual forma, se incautaron teléfonos celulares y computadores fiscales.
El subcomisario Óscar Gutiérrez, de la Brigada Investigadora de Lavado de Activos (Brilac), dijo que, entre los tres detenidos, está el "principal o cabecilla de ellos, quien era la persona que tenía que realizar la subcontratación de los fiscalizadores".
"Era también quien recibía los pagos de dinero en su cuenta corriente y luego les pagaba a estos funcionarios públicos; se juntaban en el aeropuerto y le hacía los pagos en efectivo", detalló.
El sujeto "logró acumular gran cantidad de dinero a través de coimas (...), lo que le permitió tener un patrimonio elevado versus el sueldo que recibía, llegando a los 500 millones de pesos que se logró detectar y que se dividía en bienes inmuebles, parcelas de gran tamaño, y vehículos motorizados".
En cuanto a la participación dentro de la organización criminal, que a la fecha consta de más de 20 personas, de los otros detenidos formalizados por la Fiscalía, esta consistía en "el rol de fiscalizadores, los que ayudaban a que se concretara el delito contrabando y que ingresara mercadería de forma ilícita a Chile".
"Se logró la incautación de diversas especies electrónicas, documentación de interés y se lograron medidas cautelares reales sobre bienes muebles e inmuebles", aseveró Gutiérrez.
Finalmente, expuso que "se logró la prohibición de enajenación de dos propiedades que alcanzaban los 500 millones de pesos y sobre dos vehículos motorizados que alcanzan los 50 millones de pesos, además del congelamiento de 13 cuentas bancarias de estos funcionarios públicos".