Asegurando que no dialogarán y “menos sentarnos a negociar con el actual gobierno”, la organización mapuche Coordinadora Arauco-Malleco (CAM), se adjudicó el atentado incendiario que este jueves dejó una serie de maquinaria quemada en Máfil.
A través de un comunicado público, dicha organización reconoció su autoría en una serie de hechos de esta naturaleza, ocurridos con ocasión del primer aniversario de la muerte de Pablo Marchant, tras recibir un disparo en la cabeza en un predio forestal en Carahue, región de La Araucanía.
Entre los ataques, se cuenta el ocurrido en el acceso al predio Santa Loreto, en el sector Runca de Máfil, el que según el escrito fue llevado a cabo por el Órgano de Resistencia Territorial (ORT) Kallfulikan, generando afectación en seis maquinarias, dos camiones, dos containers y un furgón.
El escrito de la CAM surge después que la Delegación Presidencial de Los Ríos interpusiera una querella contra todos quienes resulten responsables del hecho. En medio de este panorama, la organización indica que “no vamos a dialogar y menos sentarnos a negociar con el actual gobierno. No podemos delegar nuestra lucha a cambios institucionales que históricamente han fracasado y han dividido a nuestra gente y a nuestro territorio”.
Además, manifiestan que continuarán con sus líneas de acción, pese a la aprobación de un Estado Plurinacional en la Convención Constitucional: “el llamado es a la unidad y a la coherencia en la resistencia frontal contra el capitalismo y la persistencia colonial en el Wallmapu, ya que la plurinacionalidad no es más que una aspiración vacía en la mente de pseudointelectuales indígenas, nostálgicos de izquierda y del nuevo aparato estatal que quiere atomizar a las expresiones revolucionarias y de resistencia de nuestro pueblo con políticas sin legitimidad territorial”
En otro de los puntos, la organización también asegura que “profundizaremos nuestro proyecto estratégico tanto en lo militar, en lo político-cultural así como en lo productivo, intensificando las recuperaciones territoriales, las siembras en las tierras reapropiadas”, advirtieron.