Con la conferencia Cambio climático, ¿hacia una mirada verde?, el expresidente chileno Ricardo Lagos (2000-2006) inauguró este viernes el festival de divulgación científica Puerto de Ideas, en la ciudad de Antofagasta, en el norte del país.
Cerca de 80 científicos, intelectuales y artistas de Chile y el extranjero se han reunido en la ciudad minera ubicada en la mitad del desierto más árido del mundo con el objetivo de sacar a la ciencia de los laboratorios para acercarla a todas las personas.
“Lo que ha ocurrido con la actividad del ser humano en este planeta es que ahora, dependiendo de nuestra conducta futura, la vida misma del ser humano está en cuestión en este planeta”, señaló Lagos en la charla inaugural de este evento que durante tres días convocará a cerca de 16.000 personas en una fiesta en torno a las matemáticas, astronomía, química, psiquiatría y la neurociencia, entre otras disciplinas.
“¿Cuál es la responsabilidad de cada país? Es lo que hace difícil el debate político. Es el tema central”, reflexionó Lagos en el Teatro Municipal de Antofagasta.
Para el expresidente socialista, que luego de dejar La Moneda fue durante cinco años representante de Naciones Unidas para el cambio climático, “el nivel de emisión por habitante será el parámetro para medir la civilización hoy”.
Lagos indicó que Estados Unidos emite 22 toneladas por personas. Europa, entre 10 y 12. América Latina, entre cinco y seis. China, cinco. India, tres.
“El asunto es que los países desarrollados pueden darse el lujo de no crecer, pero nosotros tenemos que seguir creciendo. ¿O se puede crecer emitiendo menos? Sí, se puede, pero es más difícil. Es el nuevo paradigma que ha nacido en el siglo XXI”, indicó el exmandatario.
Lagos dijo que Chile no alcanza a producir el tercio de un 1%, pero eso no quiere decir que no tenga responsabilidad respecto del cambio climático.
“Chile tiene que predicar con el ejemplo. El precio del cobre va a depender de si emitió más o menos gases de efecto invernadero. Eso no nos puede resultar indiferente y no estamos hablando de un futuro lejano. Tenemos que tener políticas públicas que apunten en esa dirección, porque el cobre verde está aquí para quedarse”.