Luego que la Congregación de los Sagrados Corazones reconociera que se recibieron dos denuncias por abusos cometidos por el fallecido sacerdote Enrique Moreno Laval, una de las víctimas entregó detalles sobre su testimonio.
Hernán Sagredo, de 32 años, era uno de los "nietos putativos" de Moreno, quien acogió a menores durante la dictadura, en el marco de su trabajo en la defensa de los derechos humanos.
En conversación con Cooperativa, Sagredo explica que recién en 2013 reconoció como abusos las situaciones vividas con el religioso cuando tenía entre 8 y 10 años.
"Iba a la casa, hacía una inspección de dormitorios, porque era muy disciplinado en ese sentido. Siempre le gustaba que nosotros tuviéramos nuestras tareas al día, nuestros dormitorios limpios", recordó.
"Cuando terminaba de hacer la inspección, se encerraba conmigo (...) me subía a un camarote que yo tenía en mi dormitorio, me pedía que me bajara los pantalones. Sí hubo tocaciones, hubo masturbación por parte de él y de él hacia mí", relató Sagredo.
La víctima realizó la denuncia el año pasado, tras la muerte de Moreno, hecho ocurrido en Quito, Ecuador, en febrero de 2018, debido a un accidente cerebrovascular.