Oh I'm just counting

Boric consideró críticas de Sharp al acuerdo constitucional equivocadas por "falta de información". Descartó crisis

El diputado Gabriel Boric (Convergencia Social) defendió su firma, a título personal y sin representar a su partido -que no lo suscribió-, en el histórico "Acuerdo por la Paz Social y la Nueva Constitución" firmado en el Congreso, y atribuyó a la "desinformación" algunas críticas internas en el Frente Amplio.

El alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp, consideró un "gran avance" el acuerdo, pero dijo no compartir lo ocurrido en el Congreso porque, principalmente, "la asamblea constituyente no está contemplada", asegurando que es un "mecanismo distinto" a la Convención Constitucional planteada como una de las opciones para el plebiscito.

Pero la polémica continúa al interior de Convergencia Social (CS) luego de que el diputado Gabriel Boric adhiriera al "Pacto por la paz" pese a que en la interna de su colectividad aún no definían su participación en el acuerdo por una nueva Constitución.

El parlamentario descartó una crisis en CS y el Frente Amplio y aclaró que "hay mucho debate y diversidad. Estas son cosas que hemos vivido antes".

Ayer viernes el alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp, tras un duro encontrón con Boric por Twitter, renunció a la colectividad junto a otros 73 militantes, debido a que en el acuerdo constitucional se dejó fuera a la sociedad civil y se acordó un quórum de dos tercios, algo que según los descontentos le da poder de veto "a la minoría".

"Jorge va a seguir haciéndole bien a Valparaíso y en la lucha por un país más justo nos vamos a seguir encontrando. No me corresponde juzgar (la decisión de Sharp), conversaremos en su momento. Lo importante es que, independiente de las diferencias tácticas, todos estamos por terminar con la Constitución de Pinochet, y todos vamos a trabajar por ello", sostuvo.

"Hoy hay muchas pasiones desatadas, hay muchas dudas que son legítimas", puntualizó Boric, quien además enfatizó "que lo importante es que estamos avanzando en terminar con una constitución que se mantuvo durante 40 años inflexible".

Entre las razones que arguyó, Sharp apuntó al quórum de dos tercios, a que será "casi imposible" que independiente resulten electos e incluso porque "los menores de 18 años no participarán".

Boric detalló que por ejemplo "los parlamentarios no se pueden presentar si no renuncian a su condición de tales; hay una reforma en tramite respecto a que puedan votar mayores de 16 años, pero eso no lo contempla la ley actual para ninguna elección, por lo que no es una exclusión propia de este acuerdo".

Asimismo, resaltó que "cualquier persona puede postularse a la elección, y nos vamos a preocupar de que sean en igualdad de condiciones los independientes con los de los partidos políticos. Vamos a pelear para que haya cuotas para pueblos originarios y una corrección de género, hay muchas cosas que están viéndose y trabajándose".

Consultado en Lo Que Queda del Día sobre por qué firmó el acuerdo a título personal y su partido no lo suscribió, Boric admitió que "fue una decisión difícil" y reconoció que "hay una discusión al interior del partido, yo estuve con la presidenta durante todo el proceso, las casi 14 horas que duró, y hubo una diferencia en el momento final, pero eso es algo que el partido resolverá en los próximos días".

"Destaco, más allá de estas discusiones internas, que son legítimas, es que avanzamos en más democracia, y para más adelante lo que va a quedar es que terminamos con la constitución de Pinochet más que las discusiones que tengamos en Convergencia Social", expresó.

"No quiero una Constitución de izquierda, sino una que represente a todos" 
Eso sí, planteó que llegar a este acuerdo "costó 180 ojos, varias violaciones (a los DD.HH.), muchas torturas, detenidos, muchos impactos de bala, ese es el costo más duro y que más siento que hayamos tenido que pagar por algo que se debió haber hecho hace mucho tiempo, que es tener una Constitución democrática y legítima para todos los chilenos", en tanto que las conversaciones entre políticos "no cuestan, es parte de nuestro deber".

Reveló que "teníamos diferencias respecto a la dimensión de las violaciones a los derechos humanos, pero, sin perjuicio de ello, lo importante es que independiente de todas las diferencias políticas, se pudo avanzar en tener un acuerdo que le va a entregar más democracia al pueblo de Chile. Es un avance en la dirección correcta".

Además, expuso que "no quiero que haya una Constitución de izquierda; quiero una en que todos los chilenos y chilenas nos sintamos representados. Y es tremendamente importante, porque tienen que ser una 'casa común', no como es la Constitución de 1980, hoy día, que sólo representa a un sector de la sociedad".

"Logramos romper una barrera que no fue posible en 40 años" en un acuerdo de "buena voluntad", que "no hubiese sido posible si el pueblo chileno no hubiera salido a las calles", sostuvo el diptuado por Magallanes.

"Pero falta mucho, no hemos resuelto el problema de las pensiones, no hemos resuelto la desigualdad, de la dignidad de la vida en chile, y es algo que tenemos que tener muy presente, porque la firma de un papel no mejora por sí misma la calidad de vida", sentenció.

Por ello, "vamos a seguir trabajando para solucionar las urgencias sociales, hay que aumentar las pensiones para que no sean de miseria, los sueldos mínimos, y además, terminar con los privilegias de una vez por todas, bajar la dieta de los parlamentarios en 50 por ciento, y además seguir trabajando para que no haya impunidad en las violaciones a los derechos humanos que se han cometido en el último mes".

Del Frente Amplio, además de Boric, también suscribieron el acuerdo Revolución Democrática, a través de su timonel, la diputada Catalina Pérez, el Partido Liberal y Comunes.