Cathy Barriga vuelve a estar en la polémica tras confirmarse que Contraloría iniciará una auditoría para conocer al origen de los recursos utilizados en distintas compras que se habrían realizado con cargo a dicha comuna y al Fondo de Apoyo a la Educación Pública (PAEP).
La fiscalización obedece a la petición de parlamentarios de oposición y los concejales Gonzalo Ponce Bórquez y Ariel Ramos de la Municipalidad de Maipú, quienes se dirigieron hasta la entidad por la adquisición de peluches con fondos públicos que habría efectuado la jefa comunal.
Esto, luego que en septiembre de 2018 se informara que la Corporación Municipal de Educación de Maipú gastó $54.978.000 en peluches de las mascotas municipales “Renacines” y “Smapinas”.
“Las mascotas a que se hace alusión fueron creadas en el marco de la campaña educativa para incentivar a los niños y niñas a tener conciencia de la importancia sobre el cuidado del Medio Ambiente. Por eso, uno de ellos representa el agua; y el otro, el sol, que es la energía de la vida y el planeta”, justificaron desde el municipio.
Contraloría se pronunció al requerimiento planteado que apuntaba a fiscalizar dicha entidad edilicia. A través de una resolución firmada por el propio jefe del servicio Jorge Bermúdez, el ente contralor comunicó que mediante Oficio N° 12.303, de 20 de noviembre de 2018 inició una auditoría al proceso de aportes provenientes del Ministerio de Educación, específicamente los relacionados con los recursos FAEP, para el periodo comprendido entre el 1 de enero al 30 de octubre de 2018.
Al respecto, el concejal Ramos aclaró que el uso de los fondos FAEP son acotados. “En ningún caso está la compra de estos productos como los peluches. Lo que la administración de la municipalidad de Maipú está intentando asegurar es que estos peluches se compraron para hacer campañas de retención de matrículas, lo cual es absolutamente falso”, aseguró.