"No entienden nada", aseveró el senador de Renovación Nacional, Manuel José Ossandón, apuntando a la directiva del partido que preside Francisco Chahuán, en su respaldo al diputado Miguel Mellado (RN) luego que este grabara "a la mala" y filtrara a la prensa una reunión privada y secreta con el Presidente de la República en Viña del Mar.
El duro reclamo lo hizo el legislador y exalcalde de Puente Alto en el Canal VíaX, luego que el presidente de la colectividad, Francisco Chahuán, respaldara a Mellado aseverando que su desempeño en la Cámara "ha sido un extraordinario", obviando el delito que había cometido el diputado por La Araucanía. El secretario general de RN, diputado Diego Schalper, también apoyó a Mellado.
"Me da más pena, más vergüenza. O sea, por Dios, no entienden nada, nada", aseveró Ossandón, acotando que "ir a una comida con el Presidente de la República, te guste o no, es el Presidente de la República e ir como los bandidos a grabar no corresponde".
Con esas palabras, el senador Ossandón abrió el "fuego amigo" al interior del Partido, en medio de lo que han sido los cuestionamientos del oficialismo hacia la derecha por lo que el sector ha denunciado como un intento de bajar el perfil a la filtración.
Fue el propio Presidente de la República quien acusó una contradicción en las declaraciones de la oposición antes y después de que Mellado reconociera ser el autor del delito. "Lamento el cambio de discurso de la derecha una vez que se supo que era uno de los suyos quien había realizado filtración de una grabación no autorizada de una reunión de seguridad. Lo que sólo para todos ayer era un delito hoy parece ser un simple error que no merece reproche", manifestó en su cuenta de Twitter el presidente Boric.
Por su parte, el senador UDI, Iván Moreira, afirmó que "el diputado Mellado ha cometido una falta ética grave. No se trata de que lo crucifiquen con eso, pero creo que no corresponde ser tan desafiante al decir que no me da vergüenza lo que hice".
Moreira señaló que "en la vida hay códigos con los adversarios y con la institucionalidad presidencial que hay que respetar. La verdad se dice de inmediato, no se miente primero y cuando sientes que te pillaron se dice la verdad".
Por lo demás, indicó que "claramente lo que pasó nos genera una desconfianza, falta de credibilidad y yo pensé que esto nunca iba a tener que pasar en Chile. De ahora en adelante las reuniones con el Presidente y con las autoridades habrá que dejar el teléfono fuera de la oficina porque de lo contrario siempre van estar en duda las personas y nadie de nosotros vamos a querer recibir a nadie porque vamos a asumir este riesgo innecesario".