En una calle de Santiago, el sensual Spiderman fiscaliza que todos usen su mascarilla. De hecho un joven repartidor de comida no la traía y el super héroe le trajo nada más que a los africanos bailando con un ataúd!!
En una calle de Santiago, el sensual Spiderman fiscaliza que todos usen su mascarilla. De hecho un joven repartidor de comida no la traía y el super héroe le trajo nada más que a los africanos bailando con un ataúd!!