Oh I'm just counting

Reportaje: A falta de líderes, nace el universo de los súper héroes chilenos

Por Rebeca Araya Basualto“

-¡Es un pájaro!
-¡Es un avión!
- No...¡Es súperman y viene a luchar por la justicia!
 
”Creado en 1933 por Jerry Sieguel y Joe Shuster, el hermoso kryptoniano nació en los días duros de la gran depresión económica norteamericana. El combate contra el racismo o la usura capitalistas articulaban sus primeras historias. Encarnaba los valores expresados en el Nuevo Tratocon el que Roosvelt buscó devolver a su pueblo la confianza en el Estado.
 
Tras Súperman nació, desde la imaginación de diversos autores, un universo de súper héroes que tienen en común poderes extraordinarios, un código ético a toda prueba y el compromiso de proteger a su comunidad, combatir el delito y restablecer la justicia en cualquier situación, aún a costa de penurias, riesgos y sufrimientos personales.
 
En el agitado Chile del 2020, el dibujante Guido Salinas (36) y el guionista Sebastián Castro (36) no necesitaron imaginación para crear a Paremanque con su fiel compañero, el perro Matapacos, que deambulan en las calles de Santiago. Bastaron las fotos de prensa de un joven a torso descubierto y encapuchado, que usó un disco Pare como escudo para protegerse de perdigones y bombas lacrimógenas.
 
Otras manifestaciones trajeron al naciente universo súper heroico la imagen de una mujer mayor, que enfrentó sola y a palos a un zorrillo. Así nació La Wely. Un ecologista que, para cada manifestación, se hace un traje con hojas de nalcas es... Nalkaman.
 
Un manifestante que acude a las convocatorias masivas vestido de hombre araña, pues así se ganaba la vida bailando a la salida de una estación del Metro, es Spiderman. Y una mujer que decidió acudir a las manifestaciones usando el disfraz de Pikachú–personaje del anime japonés- baila feliz para el público que la anima en las manifestaciones cuando se hace presente.
En torno a todos estos personajes Salinas y Castro construyen historias que, al más puro estilo comic de inicios del siglo pasado, enredan en el relato los valores y la épica de una crisis social sin precedentes. Desde noviembre a la fecha, la historieta se difundía gratuitamente, a razón de una viñeta semanal, a través de internet. El viernes 15 de enero se inició la preventa de la edición impresa a través del link https://guardianesdelsur.cl/producto/que-no-pare-la-revolucion/, con la meta de donar todo lo recaudado al equipo médico de la Cruz Azul, que atiende a los manifestantes heridos en cada jornada de protesta.
 
 La represión siembra rebeldía
 
Sebastián Castro y Guido Salinas
 
Guido Salinas vive en Puente Alto con su pareja, es padre de dos hijos y egresó como dibujante de comic del Instituto Profesional Arcos. Conversamos sobre los súper héroes nacionales:
 
En los comic, los súper héroes son impecables y los villanos, perversos. ¿No te preocupa simplificar demasiado nuestro conflicto social en tus historias?
 
Subyace en las historias de comic el enfrentamientos de clase. Por ejemplo Lex Luthor, el enemigo de Súperman, no tiene poderes. Tiene dinero. Ese es su mega poder.
 
Nadie es absolutamente bueno o absolutamente malo. Los carabineros, villanos de tus historias, son mayoritariamente personas de origen modesto y tan jóvenes como los manifestantes.
De joven fui punk. Eso significa que desde los 15 años recibo palos de los carabineros por andar con los pelos parados, con bototos o por estar en la cola de un recital. Un tiempo fui comerciante ambulante, vendía mi trabajo en las calles. Los carabineros eran mi pesadilla. Soy parte de una generación y un modo de vivir la juventud que sólo permite ver a los carabineros como adversarios. Los dibujo como se grabaron en mi memoria.
 
¿No te parece que hablamos de una generación con uniforme enfrentada a sus iguales sin uniforme?
Ayer me encontré con un amigo menor que yo, y venía con muletas. Lo atropelló un auto de carabineros, porque estaba protestando. A lo mejor el que manejaba tenía la misma edad del atropellado. A lo mejor es de familia pobre. Pero cuando te hacen daño de esa forma, importa más lo que nos diferencia que lo que nos une. En Puente Alto es fuerte ver la cantidad de gente que anda con vendas, muletas o yeso. Uno sabe que estuvieron en las protestas.
 
Cuando todo esto pase, quedarán al menos 362 personas con daño ocular, dos de ellas ciegas. Y hombres y mujeres violados, apaleados, humillados. ¿Cómo haremos para seguir viviendo juntos?
Esto terminará cuando seamos capaces de construir una sociedad más empática e interesada en las personas. Una sociedad así requiere otro tipo de policías. ¿Cómo nos vamos a perdonar? No lo hacemos desde 1973, y las heridas de ahora ahondan las otras. Además, está a la vista un modo de actuar basado en el abuso del poder. Entonces, cuando tengamos un poder legítimo, ese poder tendrá que preguntarse cómo construye perdón y conquista respeto. Con más represión sólo siembran más rebeldía.
 
Quiltros
Guido Salinas, dibujante

¿Por qué estás personas en que ustedes basaron su comic se disfrazan y juegan, en medio de una represión durísima?
Son señales de esperanza, de la necesidad de ver cosas buenas. Esa mixtura de personajes “invulnerables”, construidos por personas que son súper pobres, sin ningún poder, que se exponen más que otros porque no podrían esconderse en la multitud, me sorprende. Y me conmueve.

¿Cuál es su recompensa?
La gente los aprecia porque le quiebran el dramatismo a lo que estamos viviendo. La señora que se disfraza de Pikachú contó que ella estaba súper deprimida por sus problemas económicos, pero que cuando la gente le grita “Baila Pikachu, baila Pikachu” eso la anima, piensa que todo podría cambiar y llega a su casa llena de energía. Por eso lo sigue haciendo.

¿Y el Matapacos? Murió hace tiempo. ¿Por qué lo metes en tus historias?
Porque es quiltro, como nosotros. Por eso se lo quiere. Y como no dejó nunca sus peleas, no podía faltar en ésta, donde ser leal y valiente es tan necesario