Oh I'm just counting

Luka Tudor tras encerrona sufrida: No hay que arriesgarse, porque da lo mismo el auto y la plata

El ex delantero de Universidad Católica y de la selección chilena Luka Tudor recordó los 30 segundos de terror que vivió la noche del miércoles cuando desconocidos le robaron su auto en una encerrona y aseguró que lo mejor en estos casos es evitar entrar en conflicto con los delincuentes.

"Quiero recalcar que hoy estoy tranquilo y ayer igual. Salí tranquilo del auto, si esto duró 30 segundos. Y en ese sentido de verdad es que destaco la frialdad que tuve, como en el área", dijo Tudor en diálogo con Las Últimas Noticias.

"Cuando que el auto se pone delante, se bajan con pistolas, yo dije, bueno, ya fui, me tocó esta cuestión. Pensé en mis hijos. Y lo otro, yo sabía que en algún momento iba a pasar y mucha gente ha dicho cómo hay que actuar. Calma, frialdad, no hay que tener movimientos bruscos, ni siquiera quise tomar el celular, porque leí por ahí que un tipo reaccionó, tiró las llaves lejos y le dispararon en las piernas", añadió Tudor, quien evitó conflictos con los ladrones.

"Uno no sabe con qué cosa vienen estos muchachos, con droga, qué sé yo. Hay un resentimiento también y listo, me pegaron en la cabeza, y no sé por qué, quizás para demostrar poder", comentó el hoy comentarista de ESPN Chile.

"Me pegaron afuera, ya asumido, porque yo salí rápido, tranquilo y el tipo se iba subiendo y me pegó, en la cabeza. He estado mareado un poco, con dolor de cabeza. Los carabineros de la Comisaría Las Tranqueras se portaron muy bien, lo mismo que la gente de la Municipalidad de Las Condes, extraordinaria", agregó antes de reflexionar respecto a lo vivido.

"En el fondo yo pensé después, esto podría ser peor, me podrían matar, disparar o quedar inválido. No hay que arriesgar, porque da lo mismo el auto y la plata, yo no vivo para eso. Eso lo tengo porque he trabajado en mi vida y me la tengo que comer no más", expresó.

"Mi mensaje es concientizarse de que te pueda pasar y que hay que estar preparado. Y tener toda la tranquilidad. Si se le queda la cartera, la billetera, el celular, da lo mismo, qué importa. Si uno no está, tus hijos lo van a sufrir toda la vida. Y lo otro, que el grado de inseguridad en que vivimos es lamentable y que veo que está muy difícil revertirlo", completó.