Oh I'm just counting

Bajo Imacec demuestra una economía desacelerada. Por José Miguel Ortiz, Diputado Comisión de Hacienda

La administración Piñera ganó las elecciones presidenciales del 2017 con la promesa de recuperar la capacidad de crecimiento económico, más empleos y mejores remuneraciones.
 
Estamos a 14 meses de su gobierno y hoy el mercado ha conocido las cifras del IMACEC marzo 2019 que han confirmado que la economía se ralentizó, que perdió la capacidad de crecer ya que Imacec marzo fue de 1,9% y el del primer trimestre llegó a 1,8%.
 
Estas cifras están muy distantes de las cifras del 2º trimestre 2018 que tuvieron un promedio de crecimiento del 5% -cifra muy lejana a la conocida hoy-. Donde se extravió la capacidad de crecer, veamos los datos: el índice de producción industrial muestra una caída importante de la producción minera en 3.5% y el consumo también ha caído -en Informe INE sobre comercio- se señala que a marzo el comercio minorista sólo creció 0,7% interanualmente y las ventas en Supermercados cayeron -1,1% en 12 meses. Esta caída de las ventas en comercio también se reflejó en caída del empleo del -1,1% en 12 meses.
 
Al mirar los salarios se ve que sólo crecieron 1% en términos reales en 12 meses y el desempleo sigue en 6,9% en 12 meses.
 
O sea estamos frente a una economía que no cumplió las expectativas de empresarios y consumidores que desde septiembre pasado están en zona negativa producto de que se cumplió la promesa de “más empleo, ni más crecimiento, ni mejores remuneraciones”.
 
Eso ha significado una caída brutal en la aprobación presidencial en los últimos meses que está en 35% y que al mirar el desglose en las familias de clases medias ahí está en 33% o sea el sector que lo llevo a ganar las elecciones muestra una clara desafección con el gobierno producto de la falta de éxito en lo económico.
 
El manejo de la economía en la encuesta de la Moneda cayó de una aprobación del 61% en abril del año pasado a un 42% en abril 2019; las políticas de empleo cayeron de una aprobación del 59% en abril 2018 a una aprobación del 40% en abril 2019; lo que revela que en estos 2 temas la caída ha sido de un 19% de aprobación en sólo un año de gestión.
 
Este bajo Imacec debe hacernos reflexionar a todas/os que en una economía con baja inversión en innovación y tan dependiente del cobre está expuesta a los avatares del comercio internacional y que este gobierno subestimó los efectos internos  de la tensión China/ EEUU y que hoy no tiene plan b) para enfrentar este decepcionante Imacec.
 
Frente a la Comisión Mixta de Presupuesto ajustó a la baja su optimista proyección de crecimiento 2019 –lo que fue alertado por toda la oposición- de 3,8% a 3,5%, pero tampoco la comparte el mercado ya que sus principales analistas señalan que Chile crecerá en torno a su PIB tendencial del 3% este año-
 
En este debate el Gobierno no ha presentado un paquete de medidas de apoyo a las exportaciones, que abran nuevos mercados o profundicen presencia de productos chilenos (por eso fue lamentable que a China no asistiera Codelco) y medidas que mejoren productividad de la economía generando más competencia en los mercados por un lado,  (por ejemplo con la distribución eléctrica que explica estas alzas inusitadas del 20% en las próximas semanas y que seguirán mientras subsista un mercado monopólico) y más diversificación productiva exportadora por otra.
 
Se requiere un plan de apoyo –construido consensualmente- para diversificar canasta exportadora, medidas para más productividad y no esperar una bala de plata como apunta Hacienda con proyecto tributario que se demorará en su trámite legislativo (y que sólo impacta en 0,3% del PIB).
 
Es bueno insistir que proyecto Tributario “No es la bala de plata” para salir de esta desaceleración económica (como lo planteó el decano de la FEN José de Gregorio), se requiere un plan b) que apoye al sector exportador, que incorpore valor agregado a lo que exportamos y que coloque el acento en recuperar el tiempo perdido en que haya más inversión pública en Innovación y Desarrollo Tecnológico donde seguimos invirtiendo apenas 0,34% del PIB.
 
La economía anda lenta, las clases medias se decepcionaron del gobierno y pareciera que en la Moneda no se dan cuenta y siguen buscando cambiar la agenda (admisión justa, migrantes) y no quieren asumir que su problema es la mala marcha de la economía.