El Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) y la Defensoría de la Niñez se querellarán en contra de quienes resulten responsables por el delito de tortura contra el adolescente de 15 años que acompañaba a Camilo Catrillanca en el tractor y que fue detenido en el procedimiento policial donde murió el comunero en Ercilla.
También se pedirán los antecedentes al fiscal nacional, Jorge Abbott, para que se explique por qué se intentó formalizar al joven, lo que fue rechazado por el Tribunal de Ercilla que declaró ilegal la detención.
Según antecedentes entregados por el INDH, el joven y Catrillanca serían amigos y el menor declaró que el comunero le estaba enseñando a manejar el tractor cuando se dieron cuenta de los disparos en sus alrededores.
El menor le dijo a Camilo que tuviera "cuidado porque están disparando", momento en que él recibió el fatal disparo en su cabeza.
Posteriormente, Carabineros bajó al joven de la máquina y habría sufrido golpizas tanto en el lugar como en el carro policial.
La defensora de la Niñez, Patricia Muñoz, recalcó que la detención del menor fue "ilegal" y que "da cuenta de una afectación personal de un adolescente de 15 años que no sólo ha debido presenciar el asesinato de un adulto a su lado, con el cual tenía un vínculo de afectividad que le estaba enseñando a manejar un tractor porque él, vez de estudiar, debe mantener a su familia que vive en una absoluta situación de precariedad".