"El gobierno actual no tiene ni la capacidad ni el liderazgo para superar la crisis de inseguridad", aseguró el excandidato presidencial del Partido Republicano, el ultra derechista José Antonio Kast durante la Conferencia Política de Acción Conservadora (CPAC) que se realizó en México.
En la instancia insistió en cuestionar la gestión de la administración de Gabriel Boric sobre los últimos hechos de violencia ocurridos en el país. Desde el jueves pasado se han producido doce muertos en este contexto solo en la Región Metropolitana.
"Hay muchos en Chile que, al igual que en México y en otros países de Latinoamérica, que en esos gobiernos y en esos municipios, son cómplices pasivos de la violencia legitiman el debilitamiento de la autoridad o derechamente, tienen vínculos con el inmenso poder del narcotráfico y el crimen organizado", replicó.
"Le hago también un emplazamiento al Presidente Gabriel Boric para que tome acciones concretas y saque de su Gobierno a todos los que apoyan al dictador de Venezuela. En Chile, el PC es parte del Gobierno y sigue siendo aliado de Maduro", expresó el excandidato presidencial desde el Hotel Continental, que congregó a los principales líderes conservadores del mundo.
Según aseguró Kast, la tienda liderada por Lautaro Carmona "lo justifica, lo valida, y ha recibido financiamiento de Venezuela", por lo que los acusó de ser "cómplices de un régimen que viola los derechos humanos", consignó El Mercurio.
"Llegó la hora de que el Presidente de Chile se decida: si va a seguir apoyando a los cómplices de Maduro o si va a apoyar a los millones de venezolanos que luchan por la libertad", enfatizó el líder ultra derechista.
Kast recriminó duramente el actuar del mandatario venezolano, a quien acusó de "no ser un líder legítimo", sino "un dictador que debe ser denunciado por la comunidad internacional, llevado ante la justicia por los crímenes que ha cometido contra su propio pueblo y ser encarcelado por ellos".
Añadió que "la dictadura en Venezuela" ha "golpeado" la democracia de ese país y también en la región, por lo que indicó que la situación "es un recordatorio escalofriante de lo que sucede cuando se permite que el poder se corrompa por falta de control".
"Un Gobierno que no respeta la voluntad democrática del pueblo es un Gobierno ilegítimo, y un Gobierno ilegítimo es una amenaza para la paz y la estabilidad de la región y del mundo", exclamó en el evento..
"Sufrimos una de las derrotas más difíciles"
El líder republicano también dedicó palabras sobre la situación que vive Chile al recordar el estallido social, período que catalogó como "una de las crisis más graves de su historia reciente", y agregó que "los sectores de derecha sufrimos una de las derrotas más difíciles que jamás habíamos conocido".
En esa línea, también emitió críticas a otros partidos de la derecha chilena al manifestar que "mientras algunos se doblegaban, confundidos por las circunstancias, abrazando las banderas de nuestros adversarios y perdiendo de vista los principios y convicciones, nosotros, desde el naciente Partido Republicano, decidimos no rendirnos".