Oh I'm just counting

Editorial: Resolver las crisis requiere restablecer las confianzas en las instituciones

En el país se agudizan las crisis, ya no es sólo la crisis social provocada por una fuerte desigualdad que se arrastra por décadas sino ahora estamos ad portas de una crisis económica generada por el fuerte impacto del Covid 19 en China y que se extiende por Europa, junto a una emergencia sanitaria para evitar que se propague ese virus en los adultos mayores y otros grupos de riesgo lo que requiere tomar una serie de medidas de “distanciamiento social” que tienen múltiples efectos en la sociedad.
 
Enfrentar exitosamente estas crisis requiere revertir la baja credibilidad y falta de confianza en instituciones básicas del país como son la Presidencia de la República, el Congreso, los medios de comunicación, los partidos políticos, los ministerios que son las instancias básicas que deben definir políticas y comunicarlas adecuadamente para que ellas puedan implementarse en las comunidades.
 
Para enfrentar la crisis del Covid 19 hay que aprender rápido de los errores en España e Italia y transversalmente se plantea una intervención temprana recomendando quedarse en casa, suspendiendo las actividades escolares, productivas, comerciales y recreativas para así evitar la propagación del virus en los próximos 15 días, con lo cual se protege a los adultos mayores y sectores vulnerables o en riesgo ante el Covid 19 y adicionalmente controlar las fronteras, para disminuir los riesgos de importación del virus desde Europa y Asia.
 
Estas materias han mostrado a un Gobierno confundido, durante horas no tuvo claridad estratégica sobre si suspender o no las clases, finalmente aceptó su suspensión por 15 días debido a la presión de alcaldes, médicos y opinión pública, pero se revelaron falencias y errores de gestión muy preocupantes. Y el monitoreo de las cuarentenas de las personas que llegan desde Europa ha sido criticado por lo débil que es en el aeropuerto. Hasta el momento, el manejo de esta crisis sanitaria deja muchas preocupaciones.
 
Cuando hay autoridades sin confianza ciudadana se requiere construir una mínima institucionalidad que restablezca la confiabilidad en las decisiones que toma la autoridad y en este caso parece sensato que el país opte por construir un comité transversal de Emergencia constituido por expertos, científicos, salubristas que de manera razonada y pensada informen de la evolución de la pandemia y de las medidas que debe tomar la población para lo cual se requiere una vocería confiable, que no pueden ser las autoridades que carecen de confiabilidad ciudadana.
 
Es de esperar que en La Moneda no exista un 2º piso que quiera sacar ventajas políticas de esta crisis, mostrando un gobierno activo, con múltiples puntos de prensa en Palacio, porque ya sabemos que eso es puro humo comunicacional y que no ayuda a dar la necesaria tranquilidad a la población.
 
La comunicación pública de las medidas requiere credibilidad, se debe fomentar la responsabilidad y solidaridad social con los posibles afectados si el Covid19 y que se implemente el distanciamiento social.
 
Esa solidaridad con los adultos mayores y vulnerables parte quedándose en la casa en el caso de los jóvenes y trabajadores que pueden hacerlo; pero también otros harán una tarea de servicio a los demás que debe apreciarse como los que estarán en los turnos éticos en los colegios para dar la alimentación escolar, los profesionales y funcionarios de la salud que atenderán a los afectados.

 
También viviremos una crisis económica. Nuestro principal destino de lo que exportamos es a China –casi 40% del comercio exterior- lo que ha significado una caída fuerte de su actividad económica –se proyecta un crecimiento 2020 de apenas 2%- lo que traerá aparejada una casi recesión en la economía mundial y por supuesto en Chile –el precio del cobre ya ha caído 12% en comparación al precio pre-coronavirus.
 
Chile ya vivía un estancamiento económico lo que se agudizará y probablemente tendremos Imacec negativos en estos meses.
 Es relevante entonces tener una política fiscal contra cíclica que signifique ejecutar un presupuesto fiscal que crece 8% -en especial en materia de inversión pública-para este año y de ser necesario gastar más para contener la crisis en apoyo a las PYMES o a las personas que pierdan su empleo debiera ser respaldado por todo el espectro político.

 

Es hora de la Solidaridad.