El gobernador regional de Arica y Parinacota, Diego Paco, abordó la crisis de seguridad que vive el norte del país, especialmente tras la salida del sicario Alberto Carlos Mejía por un paso fronterizo no habilitado. La autoridad fue enfática: “Aquí nosotros hablamos de lo del escape del sicario de la cárcel, no es una negligencia, es un estado fallido”.
Paco criticó la descoordinación institucional que permitió que el imputado ingresara irregularmente por el norte, cruzara el país, asesinara a un ciudadano chileno, entrara en prisión preventiva, fuera liberado al día siguiente, y luego saliera nuevamente por la frontera. “Nos hemos preocupado mucho del ingreso de las personas, pero no hay ningún control para el egreso, como ocurrió en el caso de este sicario”, afirmó.
El gobernador explicó que en la frontera norte “las instituciones funcionan como islas” y que “no hay una base de datos en conjunto, integrada, donde el Ejército, PDI, Carabineros puedan verla en conjunto”. Afirmó que el control actual “es fácil de escabullirse o engañar” y que, con identidades falsas, los delincuentes “pasan de manera libre”.
“Hoy día las instituciones públicas que trabajan en los bordes fronterizos no deberían ser celosas de la información, no deberían funcionar como islas. Deberíamos tener un control único integrado con la información disponible”, propuso Paco, y agregó que el Ejército, por falta de facultades, “es un mero testigo con las limitaciones que le han puesto desde el nivel central”.
También apuntó a la infraestructura obsoleta del complejo Chacalluta y a la falta de inversión estatal: “Tenemos una legislación del siglo XIX, una escasa infraestructura y escasa tecnología del siglo XX, y con eso estamos enfrentando a las bandas criminales del siglo XXI”. Paco planteó que “el Ministerio de Seguridad, el Presidente de la República, la Delegación Presidencial, la Seremi de Seguridad tienen que hacer el rol verdadero de coordinar”.
Por último, advirtió que la situación no es solo migratoria, sino que también interna: “Cerro Chuño hoy día se parece más a Caracas que a Las Condes de Santiago. Hay 705 viviendas tomadas y controladas por el crimen organizado. No ha pasado nada”, dijo en Mega y radio Agricultura.
Gobernador de Arica denuncia ausencia del Estado en la frontera: “Aquí el Ejército es un mero testigo”


